El 80,4 por ciento de los economistas consideran que la situación económica regional ha empeorado respecto a un año atrás, y la suspenden con un 2,81 sobre diez, frente al 3,25 nacional; puntuación similar a la anterior edición (junio de 2012), según se refleja en el Barómetro del Colegio de Economistas correspondiente a enero.

Aunque prevén una ligera mejoría en ambos ámbitos para dentro de seis meses, subiendo la nota media regional y nacional tres décimas, hasta el 3,14 y 3,61, respectivamente.

Respecto a la situación económica personal en relación con un año atrás, el 56,1 por ciento de los encuestados —empresarios, profesionales por cuenta propia, asalariados del sector privado y público—, manifiestan que ha empeorado, especialmente los empleados del sector público (66,7%).

Además, el 60 por ciento destacan como fortalezas "las condiciones naturales de gran potencial para el desarrollo del sector agroalimentario, el turismo residencial y las energías renovables", la gran competitividad en determinados productos y el creciente grado de innovación, técnica y gerencial en la agricultura e industria agroalimentaria.

Entre las debilidades de la economía regional, el 56,7 por ciento menciona el paro, el 49,3 por ciento, el escaso gasto en I+D+i por parte de las empresas y en tercer lugar, con el 39,6 por ciento, las informaciones sobre corrupción y tratos de favor, "que es el porcentaje más alto que este debilidad ha obtenido en todas las ediciones del barómetro", según ha detallado en rueda de prensa el vicedecano del Colegio de Economistas, José Ignacio Gras.

En cuanto a los sectores sobre los que recaen unas ligeras expectativas de crecimiento, según el barómetro, son la industria agroalimentaria, la agricultura, así como el turismo, ocio y hostelería. Por contra, el sector de la construcción es el menos valorado hacia adelante, y se espera que continúe el proceso de ajuste en este sector.

Sobre la evolución de la situación financiera de las empresas y familias en los próximos seis meses, el 60,8 por ciento de los encuestados considera que la situación seguirá igual en el caso de las empresas y el 55,8 por ciento hace la misma consideración para las familias.

A pesar de todo, el decano del Colegio de Economistas, Ramón Madrid, ha señalado que "hay que ser optimistas, no perder un minuto más" y "no ser cobardes" a la hora de tomar en las medidas.