Agentes de la Policía Nacional han detenido en el distrito de Abastos de Valencia a un taxista de 39 años, de origen ruso, como presunto autor de un delito de detención ilegal, al no permitir abandonar el taxi a una clienta que llevaba en ese momento.

Según ha informado la Jefatura Superior en un comunicado, la investigación se inició el 25 de noviembre, cuando los policías tuvieron conocimiento de que una mujer había tomado un taxi a la salida de la estación de tren Joaquín Sorolla y para desplazarse a una determinada dirección. El taxista le dijo que desconocía la calle y le pidió que fuera ella quien dirigiese la marcha, ante lo cual la mujer decidió bajarse y coger otro vehículo.

No obstante, el taxista le dijo que tenía que abonar la carrera realizada, pero la mujer le espetó que no iba a pagar nada y le pidió que le dejase bajar, a lo que el conductor hizo caso omiso y comenzó a conducir, al parecer de manera temeraria y saltándose semáforos en rojo.

En un momento del trayecto, el sospechoso se vio obligado a parar, momento en que la víctima aprovechó para bajarse del coche y seguidamente éste se marchó del lugar a toda prisa, llevándose las pertenencias de la víctima.

Como consecuencia de las investigaciones, los policías averiguaron que se trataba de un taxi de la marca Seat cuyo propietario era un hombre de 39 años, de origen ruso, sobre quien pesaba una orden de búsqueda y detención para su extradición por la Interpol por un robo con violencia o intimidación cometido en Ucrania.

Finalmente, los agentes localizaron al sospechoso, que fue detenido por un presunto delito de detención ilegal y fue puesto a disposición judicial.