El expresidente del Gobierno, Felipe González, ha considerado este viernes que la petición de dimisión del PSOE al jefe del Ejecutivo es "lógica" pero confía en que "no sometan al presidente Rajoy al vayasé señor González todos los días". Además, espera que este tome las medidas necesarias para sanear la vida política.

Así, ha pedido "un enorme esfuerzo de transparencia" en los salarios y en la contabilidad de los partidos y ha recalcado también que "seguramente hay que reformar la ley electoral y, casi con toda seguridad", abordar "una reforma pausada y seria de la Constitución". Así, aunque considera que la petición de dimisión de Rajoy es "la consecuencia lógica" del clima político y los casos de corrupción, ha pedido a los suyos que no sea una constante porque "todos los días va a haber información y noticias suficientes para hacerlo".

En cuanto al presidente del Gobierno, el expresidente espera que "tome las decisiones que tiene que tomar para cortar esta situación radicalmente" y "no para buscar culpables" o tramas conspirativas. A partir de ahí, González confía en que busque acuerdos para sanear la vida política, institucional y de los partidos para enfrentarse a la crisis económica "con más sentido de lo que se ha hecho hasta ahora".

A este respecto, ha mantenido que, aunque se está saliendo de la crisis "por el más largo y el más penoso camino, se terminará por salir, tarde o temprano". Sin embargo, lamenta que de la crisis política e institucional es "mucho más difícil salir", sobre todo, si no hay un acuerdo "serio". "No sé si es el caso Bárcenas o todos los casos, pero creo que están llegando a la orilla los desechos de una enorme tormenta de una época que hemos vivido como de falsa prosperidad", advirtió.

Además, González recalcó que la justicia se encuentra "desbordada completamente por los acontecimientos", por lo que ha reclamado "medidas políticas muy severas para cortar este proceso, sanearlo y poder ofrecer al país las respuestas tanto institucionales como económicas y sociales que necesita".

Por otro lado, el expresidente ha acusado a los políticos de hacer "un juego de sombras" al hacer públicas sus declaraciones de la renta y patrimonio cuando, de hecho, están obligados a presentarlas desde 1985 y ha reconocido que "si hay algún dinero no bien avenido" no aparecerá en esas declaraciones, por lo que se ha decantado por mecanismos de control adicionales. No obstante, ha avalado la propuesta del líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, de hacerlo cada año.

Por eso, ha recalcado que sería inconcebible que responsables políticos que "han estado metidos en todos los líos que han estado metidos", volvieran a concurrir a unas elecciones y ganaran más votos.

Asimismo, González ha expresado que es comprensible el malestar social ante los casos de corrupción, y más teniendo en cuenta el momento de crisis actual, de elevado paro, de pérdida de nivel adquisitivo y de "precarización" del sistema sanitario y educativo, que hace que, junto a las redes sociales, "un problema muy difícil y extraordinariamente importante", la sensibilidad social sea "muchísimo más aguda".