En 2013, más de lo mismo. La inversión residencial, la inversión en ladrillo, va a seguir este año por los derroteros de la crisis. Según el BBVA, la inversión en vivienda se va a seguir contrayendo: un 8,3% en 2013.

Será a partir de 2014 cuando comience a registrar tasas positivas aunque moderadas (+2,1% para el conjunto del año). Eso ocurrirá tras siete años de descensos y una contracción acumulada de la inversión residencial superior al 50%.

Según BBVA Research, el ladrillo deberá enfrentarse a muchas nuevas circunstancias que añadirán más incertidumbre. Son el proceso de reestructuración del sistema financiero, la puesta en marcha de la Sareb, la eliminación de las ventajas fiscales a la compra y la subida del IVA para la vivienda, la reforma de la Ley de Arrendamientos Urbanos y la nueva regulación para las Socimi.

El servicio de estudios del banco prevé que el excedente de viviendas en venta en España se reducirá de forma "modesta" este año, siguiendo la estela de 2012. Señala su informe que el ajuste por el lado de la oferta ha sido "significativo", y podría estar cerca de su fin como consecuencia de la "fuerte" reducción en el número de viviendas iniciadas o en el empleo en el sector.

Destaca el BBVA que en algunas regiones como Cantabria, Navarra, País Vasco y Madrid los volúmenes de viviendas nuevas sin vender se sitúan actualmente en el entorno del 2% del parque residencial frente a alrededor de un 4% para el total de España. Según este informe, estos datos "evidencian que el desequilibrio del mercado inmobiliario en estas regiones está próximo a su corrección".

Finalmente, el BBVA Research constata un "fuerte" dinamismo de la demanda de vivienda por parte de extranjeros, demanda que cree podría consolidarse en 2013.