Nunca hubo tanto mundo condensado en un muñeco tan pequeño. El click, ese juguete con forma humana capaz de adoptar más de mil caras y personalidades, está en plena forma a pesar de la crisis reinante. Sus seguidores (los hay por miles en España) plasman sus fantasías y las realidades que les rodean, tanto personales, culturales y sociales, con tan solo un puñado de clicks.

Playmobil, el padre de la criatura, de capital alemán, está fuertemente enraizado en nuestro país. Tiene una filial en la localidad alicantina de Onil y mucha presencia tanto en España como en Portugal. Las ventas de 2012 fueron buenas en la península y, a nivel mundial, la compañía creció en ventas un 5,3% en 2012 hasta alcanzar los 531 millones de euros y más de 61millones de juguetes vendidos.

Los clicks tienen casa en España y asociación propia, Aesclick, con más de 200 socios actualmente y creada por un burgalés que descubrió su afición a los 30 años a través de sus hijos (tiene 3). Una mustra de que este hobby no tiene edad de iniciación. Esta comunidad, muy activa, se relaciona en la red a través de foros y se reconocen por sus seudónimos. El del fundador de la entidad es Burgobil.

Hablamos con Rebecca, Hadita para los clickeros, una de las socias residentes en Capellades (Barcelona)y llegada a esta afición a través de su novio, un enamorado de los muñecos en su versión espacial. Ya no tienen lugar en casa para tanto click. Y fueron parte de los que cedieron las 68.808 figuras para conseguir un premio Guinness de los Records en Barbastro (Aragón) en el año 2010. Participaron 130 personas y su hazaña figura en la web del Guinness.

Para los Guinness crearon un diorama, composiciones que pueden recrear casi cualquier situación, y que están entrando en el mundo museístico como una forma amena tanto para pequeños como mayores de entrar en determinados capítulos históricos de cierta complejidad explicativa.

El Museu Arqueològic de Catalunya (MAC) ha sido pionero en esta práctica pedagógica y ha organizado junto al Museu deBadalona, también en Barcelona, una exhibición que ahora itinera por Catalunya, empezando por Banyoles (Girona). Llamada Play Stories, el recorrido expositivo  pasa por la prehistoria, el antiguo Egipto, los primeros contactos comerciales por mar en el mediterraneo peninsular, los romanos o la época medieval.

Los protagonistas de esta exitosa exhibición, con más de 8.000 vistantes hasta el pasado 2 de febrero, son de nuevo estos muñecos de plástico de apenas 7,5 centímetros de alto. La recreación histórica volvió a correr a cargo de la asociación Aesclick, que este fin de semana vuelve a reunirse en otro de los eventos clásicos del grupo, la Feria Nacional de Coleccionistas de Playmobil.

El encuentro se celebra este sábado y el domingo en las Cotxeres de Sants, alcanzando ya su onceava edición. La idea comenzó en septiembre de 2005 cerca de su actual ubicación, en el Casinet d’Hostafrancs. Toda la información sobre la feria está disponible en las páginas web oficiales www.aesclick.com y www.playclicks.com.

En esta feria estará presente un diorama que ha sido creado especialmente para este diario y que recrea el reparto de ejemplares de 20 minutos en las calles. La realidad social de nuestro país también tendrá cabida en  el salón, con dioramas que representan las las crudas situaciones que viven diariamente los ciudadanos desahuciados o los parados. Sus autoras son dos mujeres, Anna y Tere. La galaxia click va ampliándose día tras día. «Cada año los hay más raros», dice Hadita. Sólo en 2012, Playmobil puso en circulación nuevas líneas de vacaciones y agentes secretos.

El grupo alemán Brandstätter fabrica los famosos clicks desde el año 1974. En la década de los años setenta, el diseñador Hans Beck impulsó la creación de estos juguetes de pequeño tamaño pero que ofrecían innumerables posibilidades de juego. En aquel momento también existía una profunda crisis económica y estos muñecos resultaban asequibles para los comprador