La Generalitat Valenciana ha talado un total de 3.630 pinos muertos o gravemente afectados por el muérdago. Asimismo, ha destacado que según el inventario sistemático de montes gestionados por la conselleria y afectados por el muérdago en la provincia de Castellón realizado por los servicios de sanidad forestal, hay un ocho por ciento de pinos muertos o gravemente afectados por el muérdago.

Así lo ha indicado la consellera de Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, en una respuesta parlamentaria —firmada el pasado mes de junio— a una pregunta formulada por la diputada de Compromís Mónica Oltra, en relación a los pinos que se han cortado en las campañas realizadas en el Penyagolosa para luchar contra el muérdago, publicada en el Boletín Oficial de las Corts Valencianes (BOCV).

En este sentido, explica la consellera que se mantienen algunos árboles secos y muertos porque sirven de alimento a algunos insectos, que después alimentan algunas especies de aves y mamíferos. "También hay que evitar posibles daños innecesarios al suelo". Asimismo, se han dejado en pie algunos ejemplares ya muertos por considerarse que "no podían propagar ya el muérdago, que su caída no suponía peligro para los visitantes del parque natural y que la extracción de la madera era inaccesible".

"Esta decisión tiene el visto bueno de la Junta Rectora del parque natural del Penyagolosa" y los proyectos desarrollan los trabajos establecidos en el Plan de actuación integral para el control del muérdago en el monte de Sant Joan de Penyagolosa "y siguen sus instrucciones, entre ellas, la tala de árboles afectados por el muérdago". En particular, señala que la extracción "se realizará de manera que la alteración del medio sea mínima" y "no se sacará del bosque cuando el terreno se encuentre húmedo".

Por otro lado, ha indicado que la Conselleria ha asumido las tareas de repoblación de los nuevos ejemplares, al tiempo que ha señalado que el grado de mortalidad de las plantaciones de nuevos ejemplares se encuentra entre un 10 y un 20 por ciento según las zonas y especies.

Suelo privado

En cuanto a las medidas contra el muérdago en suelo forestal de titularidad privada, la Conselleria está redactando una instrucción relativa a las condiciones fitosanitarias que deben regir en los aprovechamientos y tratamientos silvícolas, donde se incluirán criterios para la reducción del muérdago en los terrenos forestales de propiedad privada.

Por otro lado, los técnicos de Aragón y la Comunitat Valenciana han acordado recientemente una metodología común para la delimitación de parcelas de seguimiento permanente de los daños del muérdago en pinares. Estas parcelas "acaban de ser instaladas en la montaña de Sant Joan".