La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo ha archivado la queja presentada por el padre de una supuesta niña robada al nacer en el Hospital Clínico de Granada, Eduardo Raya, que es además presidente de la Asociación de Afectados por la Desaparición de Niños en Democracia (ADN-D), contra la actuación de la justicia española en este asunto.

En el escrito de contestación a Raya, facilitado a Europa Press, la presidenta de la Comisión, Erminia Mazzoni, señala que el Parlamento Europeo no puede valorar su caso porque "no es una autoridad judicial" y "no puede emitir juicios ni revocar decisiones adoptadas por las autoridades judiciales y administrativas de los Estados miembros".

Archiva de esa forma su petición "sin poder emprender acción alguna al respecto", y recuerda que "después de haber agotado todas las vías legales de reclamación disponibles a nivel nacional, los ciudadanos pueden recurrir también al Tribunal Europeo de Derechos Humanos".

Al conocer esta resolución, Raya ha considerado que con esta actuación "se frustra el derecho fundamental de todo ciudadano europeo a ejercer su derecho de petición", y el Parlamento Europeo "pierde la oportunidad de llamar la atención sobre la violación de los derechos humanos en España" con respecto a los casos de los niños robados, lo que, en su opinión, "deja entrever la existencia de una 'mano negra' en la actuación del Estado español que trasciende nuestras fronteras".