El consejero de Industria y Empleo, Graciano Torre, ha dicho este jueves que la última reunión que los sindicatos mineros mantuvieron con el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, "abre una nueva expectativa" y contrasta con la posición que venía manteniendo el Gobierno hasta la fecha acerca del futuro del sector del carbón. Desde el Ministerio se ha emplazado a los sindicatos a negociar junto a la patronal Carbunión.

En la sesión plenaria de la Junta General del Principado de Asturias, Torre ha dicho que esta postura contrasta con el encuentro que él mismo mantuvo con Nadal, del que salió "desolado" porque sus argumentos en defensa del sector chocaban una y otra vez "contra un muro" que ya parecía haber tomado una decisión "irreversible" y "absolutamente firme". Ahora, atribuye ese cambio de posición a los "juegos malabares" que realiza el Gobierno central.

Torre ha indicado que la situación de la minería del carbón es "tremendamente complicada" porque las empresas no han cobrado las ayudas a las empresas correspondientes al año 2012. Y que esto está dando "excusas" a los empresarios para despedir a trabajadores, destruyendo empleo estructural en Asturias.

El consejero se ha pronunciado en estos términos en una interpelación del portavoz de IU, Ángel González, que ha lamentado el trato que el Gobierno central da al Principado. A su juicio, Nadal, al que ha tildado de "señorito obediente de las eléctricas" sólo vio en Torre a un "consejero de provincias".

Por eso ha reprochado a Torre que dijese públicamente que salía desolado de esa reunión. "Tenía que haber salido cabreado", ha insistido, acusando al Ejecutivo de central de empeñarse en cerrar las minas.

IU también critica la decisión del Gobierno de reducir el carbón autóctono que se quema en las eléctricas. "Eso sólo va a suponer más carbón manchado de sangre y de esclavismo, incluso de niños", ha manifestado en relación al carbón de importación.