En Valencia recibimos en torno a 10.000. Desde hace dos años, el 20% corresponde a inmigrantes, sobre todo latinoamericanos.

¿A qué se debe esto?

A que tienen muchas pérdidas y mucha soledad. Viven en la provisionalidad económica y con la culpabilidad de dejarse seres queridos en sus países.

¿Qué les ofrece el Teléfono de la Esperanza?

Ante todo, escucha. La mayoría de los que llaman tiene problemas de soledad, falta de comunicación y problemas familiares. Además, si vemos que es necesario les citamos aquí con un equipo de psicólogos y abogados de manera gratuita y hacemos terapia.

¿En qué consistirá el programa para inmigrantes?

Ofreceremos crear grupos  en fines de semana y fiestas para atenderlos psicológicamente y que se ayuden entre ellos. Todavía hay mucha xenofobia y vivir así acaba en la depresión.

¿Hay un perfil concreto?

A los marroquíes, por ejemplo, les cuesta más llamar y venir hasta aquí por el idioma.

Bio

Nació en Villar de la Encina (Cuenca) en 1937. Vivió en Iberoamérica y lleva 35 años al frente del Teléfono de la Esperanza.