Un policía local del Ayuntamiento de Ciudad Real, que responde a las iniciales M.V.S., ha asesinado presuntamente a su expareja, M.P.T.C., a primera hora de este miércoles a las puertas de un centro con locales comerciales donde trabajaba en la calle Real de la capital ciudadrealeña, tras lo que se ha suicidado de un disparo en un aparcamiento situado enfrente del lugar de los hechos.

El hombre, de 36 años de edad, había mantenido una relación sentimental con la fallecida, de 28 años, y ambos eran naturales de la localidad de Bolaños de Calatrava. El presunto agresor tenía dos hijos de una relación anterior, y la víctima, por su parte, tenía un hijo de 8 años de edad también de otra relación.

Según testigos presenciales, un viandante que ha visto a la pareja discutir ha recriminado al hombre por su actitud, tras lo que éste ha disparado contra el viandante sin llegar a herirle. Momentos después, el atacante habría disparado en tres ocasiones contra la mujer, tras lo que fue reprendido por un segundo viandante, al que también disparó momentos antes de suicidarse, sin llegar a herirle.

Los vecinos de la zona han añadido que un mendigo portugués que habitualmente suele situarse en las puertas de un supermercado de la zona ha sido testigo de los hechos, por lo que fue trasladado a sede policial para dar su versión de los hechos.

Orden de alejamiento

El policía local tenía una orden de alejamiento desde el pasado 8 de diciembre tras una denuncia interpuesta por la víctima, medida que fue revocada este mismo lunes después de que el Ministerio Fiscal solicitara el sobreseimiento provisional de la causa "por no quedar debidamente acreditados los hechos motivo de la denuncia, a la vista de las versiones contradictorias de la partes, la no persistencia de la denunciante en la incriminación y el desistimiento del recurso".

Según el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, en este presunto caso de violencia de género existía una denuncia previa que fue tramitada por el Juzgado de Almagro a través de diligencias Urgentes abiertas el 8 de diciembre de 2012, cuando se dictaron medidas de protección como la prohibición de aproximación y comunicación del presunto agresor con la víctima, así como privación del derecho a la tenencia y porte de armas.

El 10 de diciembre, el juzgado almagreño señaló un juicio de faltas para el día 13 de diciembre de 2012, vista que fue suspendida tras el anuncio por parte de la representación legal de la denunciante y víctima de la interposición de un recurso contra la incoación del juicio de faltas.

Más tarde, el 17 de diciembre, la acusación particular presentó escrito ante el juzgado desistiendo de dicho recurso, dándose traslado al Ministerio Fiscal a fin de que informara si formulaba acusación o interesaba sobreseimiento de las actuaciones.

El agresor estaba de baja

El policía local, M.V.S., se encontraba de baja de larga duración por estar recibiendo tratamiento médico relacionado con una psicopatología que la incapacitaba para realizar sus funciones, y se le había retirado el arma reglamentaria el mismo día que se dictó la orden de alejamiento, sin que a día de hoy se le hubiera devuelto, habiendo sido efectuados los disparos con otro arma.

En este sentido, la Jefatura de la Policía Local de Ciudad Real ha confirmado que el arma reglamentaria del agente sigue bajo su custodia y no se le devolvió a su interesado pese a la pérdida de vigencia de la medida de prohibición de portar armas.

Así, han confirmado que los disparos se han efectuado con un revólver particular, de calibre 357, "el cual no es reglamentario en la Policía Local de Ciudad Real", además de que la munición utilizada "tampoco es la que utiliza el Cuerpo Policial".

Consternación en bolaños

El alcalde de Bolaños de Calatrava —localidad donde residían el agresor y la víctima—, Miguel Valverde, ha asegurado que en el pueblo "están todos muy consternados y tristes", y ha subrayado que tras este "episodio trágico" quedan más víctimas, como son "la familia y todo el pueblo en general".

El primer edil bolañego ha manifestado que ha quedado suspendido el pleno ordinario previsto para este jueves, y los dos grupos políticos que forman la Corporación Municipal (PP y PSOE) han decidido elaborar un manifiesto conjunto en el que se condenará la violencia de género.

El municipio ha decretado dos días de luto oficial "para trasladar el sentimiento de tristeza" que existe en el pueblo. Por su parte, el Ayuntamiento de Ciudad Real ha decretado que este jueves sea día de luto.

Por su parte, desde el Sindicato Profesional de la Policía Local han lamentado este "trágico suceso", y han dicho a Europa Press que no se puede vincular esta profesión con lo ocurrido.

El portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Francisco Cañizares, también ha condenado "con absoluta rotundidad y dureza" el suceso, y ha señalado que lo ocurrido es "un hecho gravísimo" que supone, "por desgracia", uno más "de esta terrible lacra que es la violencia de género".

De otro lado, la alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, ha mostrado su "total condena y repulsa" por los hechos ocurridos y ha mandado su pésame tanto a la familia de ella, como a la familia de él, dado que ha considerado que también son "víctimas". Asimismo, Romero ha mandado también el pésame al cuerpo de la Policía Local al que pertenecía el hombre.