La Audiencia de Málaga ha confirmado la condena al pago de una multa de 120 euros impuesta por un juzgado a un hombre cuyas ovejas se comieron algunos brotes de 10 olivos, tras entrar en una finca propiedad de otra persona. Así, el Tribunal rechaza el recurso de apelación interpuesto por el denunciado.

Según se recoge en la sentencia de la Sala, a la que ha tenido acceso Europa Press, el Juzgado de Instrucción número 13 de Málaga declaró probado que el día 13 de abril del pasado año 2012, el denunciado llevaba un rebaño de ovejas y algunas de ellas entraron en la finca propiedad de otra persona.

Entonces, los animales se comieron los brotes más bajos de 10 olivos. Por contra, no se consideró acreditado que el ganado causase daños a un eucalipto ni que este árbol fuese cortado por el denunciado, al que se le condenó por una falta contra los intereses generales, al pago de una multa de 120 euros.

La defensa del hombre argumentó en su recurso que hubo, por parte del juzgador, un error a la hora de valorar la prueba, al sostener que el rebaño de su cliente no causó daños en los olivos del denunciante, por lo que solicitaba que se le absolviera, al no reunirse los requisitos del tipo penal.

Frente a esto, la Sala recuerda que el juez tuvo en cuenta la declaración del propietario de la parcela, pero sobre todo la de un testigo que aquel día vio desde su coche "un montón de ovejas metidas en la finca, junto a los olivos", siendo el denunciado el único que tiene rebaño por la zona.

Asimismo, también se basó la condena en el informe de inspección ocular realizado por la Guardia Civil, en el que se hace constar los daños que se observaron en los olivos, ya que las ramas más bajas "estaban comidas", además de que en la finca se detectaron "huellas y erosión como consecuencia del paso de ganado".