Efectivos de la Brigada de Policía Judicial de la Policía Nacional han detenido a un individuo como presunto autor de un delito de estafa a una joven a la que ofreció trabajo en una cadena de distribución de telefonía móvil, para lo cual la obligó a comprar una tablet por valor de 480 euros que se quedó para él.

La detención del sospechoso, de 36 años de edad, y cuyo nombre responde a las iniciales O.G.S, se produjo el pasado martes, 29 de enero, según ha informado este jueves la Jefatura Superior de Policía de Cantabria.

El detenido ofreció a una chica un trabajo de gerente en una oficina de una conocida cadena de distribución de telefonía móvil, que iba abrirse proximamente en Santander.

Para ello, el presunto estafador dijo a la víctima que debía disponer de un teléfono móvil y de una tablet, que compró y cargó en la cuenta de la joven, llevándose él el dispositivo para que el servicio informático de su empresa procediese al reseteado y liberación del mismo.

Entrevista en un bar

Fue el pasado 26 de enero cuando una joven denunció que unos días antes, en concreto, el día 23, se había entrevistado con un individuo que le ofreció, en una entrevista que había tenido lugar en un bar de Santander, el puesto de gerente en una oficina de una conocida empresa de distribución de telefonía móvil, que iba abrir el mes de febrero en un local cercano al Ayuntamiento.

El individuo le dijo que para desempeñar su trabajo, le iba a comprar un teléfono móvil y una tablet, para lo cual acudieron a un comercio de telefonía de la ciudad, en donde compró una tablet valorada en 480 euros que puso a nombre de la joven y cargó en su cuenta.

Quedó pendiente de un cambio de compañía con portabilidad, para conseguir el teléfono valorado en 600 euros, para lo que quedaron en volver a verse en unos días para decirla que tarifa de datos le convenía.

SOSPECHAS

La joven sospechó que podría haber sido víctima de una estafa cuando, al llamar al local en donde el sujeto le dijo que se abriría próximamente la oficina que iba a dirigir, le dijeron que no estaba alquilado a ninguna compañía de telefonía.

Por ello, la víctima denunció los hechos, que terminaron con la detención de O.G.S, al que le constaban cuatro detenciones anteriores y que pasó a disposición judicial.