ANPE presentó al Gobierno el pasado marzo un decálogo de normas para "que se establezca la tolerancia cero con los actos de violencia escolar". Una de ellas es que se instaure en España un nuevo sistema sancionador que castigue al acosador.

En este sentido se dirige también el compromiso de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que calificará las agresiones a estos profesionales como "atentados" contra funcionarios, al afectar a personas que trabajan en centros de ámbito público. Serán consideradas delitos que podrían estar castigados con penas de hasta cuatro años de prisión.

Ahora más sensibles

Frente a estas propuestas, el Ministerio de Educación apuesta por una "respuesta educativa". Para ello, elabora un plan para la Mejora de la Convivencia Escolar, que incluye la creación de un Observatorio y Protocolos de actuación adecuados para atajar un problema que, en su opinión, "siempre ha existido, pero ahora somos más sensibles a ello", indica Alejandro Tiana, secretario general de Educación.

"A los chicos hay que conquistarlos moralmente. No es algo generalizado ni para tener protección policial (como el sindicato de profesores CSI-CSIF propuso)", afirma Lola Abelló, presidenta de la Confederación de Padres y Madres de Alumnos.

El psicólogo y autor del Estudio Cisneros VIII, Violencia contra Profesores, Iñaki Piñuel, cree que "judicializar la vida escolar es un recurso extremo. El maestro debe recuperar su autoridad, padres y alumnos agresores deben ser reeducados y es necesario que se evalúe la violencia contra estos profesionales como un riesgo laboral", añade Piñuel.

Hoy habrá un paro simbólico en los centros cordobeses por la agresión a uno de sus docentes el pasado miércoles.

Escalada de agresiones

Mar Segura, de 34 años, profesora en un colegio de Madrid, reveló el pasado jueves a 20 minutos que sufre agresiones de sus alumnos a diario.

En el CEIP Eduard Marquina de Barcelona, los familiares de unos alumnos pegaron al equipo directivo el pasado 11 de octubre. A Ángel Azpiroz, de 58 años, director de un IES de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), el padre de un alumno le propinó un cabezazo el pasado 18 de septiembre.

Además, un educador de secundaria de Valencia, J. V., murió el pasado 9 de agosto tras pasar 11 días en coma, aunque todavía se investiga si el ataque que le provocó la muerte se produjo en el entorno escolar.