Bruselas y Rabat arrancan este miércoles una nueva ronda para tratar de cerrar un acuerdo pesquero

La Comisión Europea y las autoridades marroquíes retoman este miércoles una nueva ronda de negociaciones, prevista hasta el viernes en Bruselas, en la que tratarán de cerrar un acuerdo de pesca que permita a la flota comunitaria, sobre todo española, volver a faenar en aguas gestionadas por Rabat.

La Comisión Europea y las autoridades marroquíes retoman este miércoles una nueva ronda de negociaciones, prevista hasta el viernes en Bruselas, en la que tratarán de cerrar un acuerdo de pesca que permita a la flota comunitaria, sobre todo española, volver a faenar en aguas gestionadas por Rabat.

El equipo del Ejecutivo comunitario afronta las negociaciones con "confianza y buen espíritu", según fuentes próximas a la comisaria de Pesca, Maria Damanaki, pero también con prudencia para evitar pronunciarse sobre las posibilidades de acuerdo en esta cita.

El ministro español de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, en Bruselas a principios de esta semana sí ha dicho a la prensa que se han producido avances en cuestiones técnicas que permiten ser optimistas, aunque ha advertido de que la compensación económica a pagar por la UE puede ser uno de los últimos "escollos".

"Espero que se avance mucho y, si no se cierra en esta ronda, se pueda cerrar inmediatamente en la ronda siguiente", dijo el lunes Arias Cañete a los medios en la capital europea.

Por su parte, el sector español también confía en que se alcance un consenso cuanto antes, pero subraya la importancia de pactar unas "buenas" condiciones técnicas para que el nuevo régimen sea viable para la flota.

"Es fundamental que las condiciones técnicas sean buenas y que no se repitan casos como el de Mauritania", ha declarado a Europa Press el secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat. El representante de los armadores españoles se refiere al convenio negociado por Bruselas con Mauritania que ha sido duramente criticado por los pescadores europeos, que no han hecho uso de la mayoría de licencias obtenidas.

Sobre el estado de la negociaciones con Marruecos, Garat ha dicho que las condiciones técnicas "no son suficientes aún" para considerar que el acuerdo es "viable", pero que se está trabajando para "mejorarlas".

Aunque sea "difícil" cerrar todas las cuestiones en esta ronda, Garat espera que "por lo menos se ate lo máximo posible las cuestiones técnicas", ya que, en su opinión, de consensuar este punto, la cuestión económica no debería ser un problema.

Entre las reivindicaciones del sector español, figura la inclusión del cerco atunero congelador entre las artes permitidas y que "no se aumente el canon", porque la mayoría de las licencias son para una flota artesanal que no podría asumir el coste, según Garat.

España, principal flota afectada, y el sector han pedido insistentemente a Damanaki que buscara fórmulas para un nuevo régimen pesquero aceptable para Marruecos y sobre todo para el Parlamento Europeo.

Hace un año, los eurodiputados impidieron la renovación del convenio por dudas sobre su rentabilidad económica, su sostenibilidad y su respeto de los Derechos fundamentales del pueblo del Sáhara occidental.

Los pescadores españoles afectados, unos setenta buques, sobre todo canarios y andaluces, han recibido ayudas para compensar el parón hasta diciembre de 2012, pero las normas de la UE no permiten nuevas prórrogas.

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