La Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE) ha criticado el "obsesivo empeño" de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía por "cerrar", por motivos que considera exclusivamente "ideológicos", los doce centros de la comunidad autónoma que siguen el modelo pedagógico de educación diferenciada por sexo, a los que la administración autonómica ya ha advertido que no renovará el concierto si no se convierten a colegios mixtos.

"Que el día en que España se levanta con la cifra de seis millones de parados, Andalucía con uno y medio, el problema de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía sea éste es verdaderamente insólito", ha indicado a Europa Press el secretario general de CECE-A, Rafael Caamaño.

Para éste, "cuando lo que necesitamos es la suma de los esfuerzos de todos para salir de una situación tan angustiosa para millones de familias", la consejera del ramo, Mar Moreno, "dirige su mirada contra unos centros educativos que llevan muchos años formando a una juventud emprendedora, en barrios y familias de escasos recursos, con unos magníficos resultados académicos y de inserción laboral y en los que trabajan cientos de magníficos profesionales de la educación que ven peligrar sus puestos de trabajo".

Caamaño ha subrayado que la consejera "sabe que la sentencia del Tribunal Supremo en la que apoya sus intenciones, que ha sido ya recurrida, ha quedado superada por la normativa estatal que, en la Ley de los Presupuestos Generales del Estado —que, por cierto, no ha recurrido—, muestra claramente la voluntad del legislador actual de concertar a estos centros".

Esta voluntad, añade el secretario general de CECE-A, queda "reiterada nuevamente" en el anteproyecto de la próxima Ley Orgánica de Mejora de la Calidad en la Educación (Lomce), "preceptos legales a los que la Junta de Andalucía no puede sustraerse, salvo que quiera privar a los ciudadanos andaluces de los mismos derechos que el resto de los españoles, en lo que sería un verdadero ejercicio de intolerancia y abuso".

"Dice la consejera que invita a los colegios a acatar las sentencias, y nosotros invitamos a la Junta a acatar las leyes, tanto cuando son favorables a sus intereses como cuando no es así, como sucede ahora con la voluntad expresada por el Parlamento de nuestra nación", agrega Caamaño, que expone que sobre estos centros no pesa ningún expediente por incumplimiento de sus obligaciones ni ninguna denuncia de afectados por discriminación.

Desde CECE "volvemos a reivindicar el derecho a educar a los hijos conforme a las convicciones de las familias, sin ningún tipo de imposición ideológica, reclamando a la administración que cumpla con su obligación de ser garante de esos derechos y en ningún caso obstáculo para que las familias, y menos las de menores recursos y posibilidades, puedan elegir".