El portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, ha manifestado este martes que la futura Ley de Transparencia andaluza recogerá la prohibición de sobresueldos por parte de los partidos para sus cargos públicos de nivel autonómico.

Como se recordará, el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, planteó ayer la necesidad de "prohibir por ley" el pago de sobresueldos, por parte de los partidos, a sus cargos públicos, porque ello supone un "fraude democrático en toda regla". Precisó también que la ley de Transparencia andaluza ha de recoger que todos los cargos públicos, ejecutivos y parlamentarios, deberán estar en condiciones de detallar sus ingresos para con ello justificar el patrimonio, de arriba abajo.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, Miguel Ángel Vázquez ha manifestado que lo expresado por el presidente es un compromiso que asume el Gobierno andaluz y que se va a intentar que no solo se produzca en el marco de las competencias de la comunidad, sino que también sea extensivo al conjunto del Estado.

Se trata, según ha precisado, de unas medidas oportunas, que vienen a zanjar debates que dañan muchísimo la credibilidad de la cosa pública y de la política, al tiempo que redundarán en beneficio y en transparencia para los ciudadanos.

La ciudadanía, según ha precisado el portavoz del Gobierno, tiene derecho a saber lo que tienen los cargos públicos. "Lo que tiene un cargo público ha de estar en consonancia con lo que gana y lo que gana tiene que ser público y transparente para que lo sepa el ciudadano", ha indicado Vázquez, para quien en este asunto "no puede haber ni trampa ni cartón".

Se tiene que saber, según ha agregado, lo que tenía un cargo público cuando llegó y cuando dejó de serlo, porque se produce cierto estupor en la ciudadanía cuando se observa que hay cargos públicos que pueden hacer frente a "desembolsos millonarios" en inmuebles o yates, que no se explican por las retribuciones públicas que reciben.

Ha garantizado que la futura ley de Transparencia andaluza será "un aval para el buen funcionamiento del sistema democrático" y supondrá un "revulsivo y un reclamo para que los ciudadanos también vuelvan a creer en la política y en la cosa pública".