Alrededor de 227.693 andaluces sufren fibrilación auricular, una arritmia cardiaca responsable de provocar más de 10.400 ictus en la comunidad, según han expuesto este martes en Sevilla expertos reunidos en una jornada sobre ictus y fibrilación auricular. De estos casos, los expertos estiman que se podrían prevenir cada año 8.700 ictus con un tratamiento anticoagulante oral.

Para concienciar sobre esta problemática y la importancia del buen control de los índices de coagulación del paciente para prevenir el riego de sufrir un ictus, el Hospital Virgen Macarena de Sevilla ha acogido la jornada 'Prevención del ictus en la fibrilación auricular no valvular'.

Esta iniciativa, promovida por Boehringer Ingelheim y por la Asociación Sevillana de Anticoagulados y Portadores de Válvulas Cardíacas, tiene el objetivo de sensibilizar y educar a los pacientes con fibrilación auricular sobre la importancia de la gestión de su propia salud para reducir el riesgo de ictus.

La sesión de formación ha estado presidida en Sevilla por el director médico del Macarena, David Moreno, así como por el presidente de la mencionada asociación de pacientes, José Carmona Dávila, quien ha admitido que un paciente anticoagulado "debe responsabilizarse de su propia salud y actuar como un agente activo en su enfermedad".