Una investigación del Museo de Bellas Artes de Asturias desvela que la mujer tras el retrato de Gaspar Melchor de Jovellados pintado por Francisco de Goya era la noble María Teresa de Vallabriga, esposa del Infante Don Luis de Borbón.

La obra data de 1784, un año después de que Goya entrase en contacto con la nobleza y uno antes de que el artista aragonés utilizase el mismo lienzo para la conocida pintura protagonizada por el ilustrado gijonés 'Retrato de Jovellanos en el arenal de San Lorenzo'. De ese mismo año, 1784, es el cuadro 'La familia del Infante Don Luis' de Goya, que ha sido de gran utilidad para el equipo investigador.

La responsable del proyecto, Clara González-Fanjul, ha explicado este jueves que tras realizar radiografías de la pintura, analizar minuciosamente los trazos para verificar que es obra del mismo Goya y contrastar los rasgos de la misteriosa mujer con nobles de la época, se ha podido confirmar que se trata de María Teresa de Vallabriga.

"Ha sido un gran esfuerzo de muchas personas", ha dicho la restauradora de la pinacoteca asturiana en rueda de prensa junto con la consejera de Educación, Cultura y Deporte del Principado de Asturias, Ana González, recordando que la primera fase de la investigación había sido presentada en 2011. Al respecto, la titular asturiana de Cultura ha incidido en la trascendencia del hallazgo, recalcando que se ha descubierto un importante misterio de la pintura española.

La investigación sobre el retrato de Jovellanos, que se encuentra en el Museo de Bellas Artes de Asturias, ha utilizado avanzadas técnicas de restauración que incluyen la digitalización de placas radiográficas de la obra, lo que permitió encontrar la imagen subyacente del retrato de una mujer de cuerpo entero con vestimenta y postura propia de la nobleza que ha terminado siendo María Teresa de Vallabriga.

INVESTIGACIONES

Los trabajos, cuyos resultados ya se conocen, se remontan al año 2010. En aquel verano, en colaboración con el Instituto de Patrimonio Histórico Español, el Museo de Bellas Artes de Asturias radiografió una serie de cuadros pertenecientes a la colección del Museo. El resultado más espectacular fue la aparición del retrato de una mujer joven bajo el retrato de Jovellanos.

En este punto comenzó una investigación para averiguar si ambos retratos podían ser del mismo autor, situar el cuadro cronológicamente y tratar de averiguar la identidad de la mujer.

La primera parte de los resultados de la investigación se presentó en febrero de 2011, pero aún sin conocer la identidad de la figura, lo que generó una gran curiosidad. Dado el interés, el equipo continuó con la investigación hasta poder saber y demostrar quién es ella.

Las conclusiones extraídas señalaban que ambas figuras están contorneadas con líneas muy radio absorbentes que delimitan las formas, y que las pinceladas cortas y decididas que describen los detalles en ambos retratos son muy parecidas. El uso del recurso de pintar sobre obras pintadas previamente son características de la forma de pintar de Goya.

Por la vestimenta y la posición apoyada en una mesa, símbolo del conocimiento, riqueza y poder se deduce su pertenencia a la nobleza. La moda la sitúa en los 5 primeros años de 1780. Los primeros retratos documentados datan de 1783, es la primera fecha en la que recibe retratos de tamaño natural, los anteriores no salían de lo establecido por las corrientes artísticas del momento.

También quedó clara la relación entre Goya y la Familia del Infante Don Luis a quienes pintó en varias ocasiones durante los veranos de 1783, 1784 en Arenas de San Pedro. Los rasgos fisonómicos de María Teresa de Borbón, niña, se corresponden con los de María Teresa de Vallabriga puesto que era su madre.

La superposición de las facciones del retrato de María Teresa de Vallabriga de la colección Pérez Simón, con los de la mujer del retrato subyacente, fue determinante para comprobar la correspondencia entre ambas.