El consejero de Industria e Innovación del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, ha inaugurado este miércoles el gasoducto de transporte secundario a la localidad zaragozana de Caspe, en el que Endesa Gas Transporte y Distribución ha invertido cerca de 3 millones de euros.

Aliaga ha declarado a los medios de comunicación que con esta infraestructura gasista se consolida la "ventaja competitiva" de Caspe y la comarca del Bajo Aragón zaragozano, ya que esta zona dispone ahora de gas natural, lo que permite que cualquier empresa que sea "gran consumidora" de este combustible no tenga "problemas ni de calidad ni de cantidad" de suministro en Caspe.

Aliaga ha explicado que en Aragón "se ha hecho un importante esfuerzo inversor estos años y tenemos una situación envidiable", de tal forma que "aun en las condiciones más adversas rara es la vez que una instalación tanto gasista como eléctrica nos deja alguna parte del territorio sin suministro". Ha agregado que "los índices de calidad del suministro de energía tanto de gas como de electricidad en Aragón son de los más altos de España, teniendo una población muy dispersa en el territorio".

El titular de Industria ha señalado que para prestar este servicio es necesario mallar el territorio. Ha celebrado que en el desarrollo de la red de gas natural de Endesa colaboren ayuntamientos y ciudadanos. El ramal inaugurado hoy llega a 800 puntos de consumo tanto doméstico como industrial, comercial y turístico, ha dicho el consejero, quien ha recordado que anteriormente se suministraba a Caspe gas propano en camión para ser almacenado y después distribuido.

Por su parte, el consejero delegado de Endesa Gas Transporte y Distribución, Fernando Bergasa, ha afirmado que los proyectos principales incluidos en la planificación energética "están prácticamente terminados". Ya están operativos, aunque no inaugurados, el ramal Fraga-Mequinenza y el que abastecerá a Belchite (Zaragoza).

El Grupo Endesa continúa desarrollando la distribución de gas con inversiones anuales superiores a los cinco millones de euros. Endesa trabaja con el Gobierno de Aragón para realizar nuevos proyectos en el periodo 2013-2020.

Bergasa ha indicado que "la parte nuclear" de la distribución gasista "está atendida" en Aragón, pero "el gas natural no ha llegado a todos los hogares y todos los negocios e industrias que tiene que llegar". La saturación media del sistema español de distribución de gas es del 27 por ciento, mientras que en la Unión Europea (UE) alcanza el 60 por ciento.

El consejero delegado ha expuesto que "estamos haciendo un trabajo intensísimo en colaboración con muchísimos agentes activos en Aragón", tales como instaladores, empresas de mantenimiento y sociedades dedicadas al desarrollo de canalizaciones "para llegar a la población, a los negocios, a la industria, y en eso nos queda mucho recorrido".

Endesa trabaja para introducir gas natural en puntos donde "las energías que están operativas son menos competitivas", ha agregado Bergasa, quien ha destacado el éxito en la instalación de calderas centrales.

Más empresas

El alcalde de Caspe, Florencio Repollés, ha considerado que la puesta en marcha del gasoducto es "una manera de poner a la altura de las poblaciones más importantes de Aragón" la capital del Bajo Aragón zaragozano y ha resaltado que esta nueva infraestructura abre la posibilidad de atraer más empresas, "que cada vez más demandan este tipo de energía por la comodidad que tiene, por la limpieza, porque es muy competitivo en precio".

Caspe recibe gas desde 1998, pero "era muy diferente tener esas bombonas de gas propano que tenían que venir por camión", ha recordado Repollés, quien ha comentado que el gas propano es "menos refinado y menos económico".

El director general de Gas Aragón, Ignacio Montaner, ha dicho que el gasoducto de gas transporta combustible desde las Cuencas Mineras, que a su vez procede de Barcelona. Ha puesto de relieve la seguridad de las instalaciones.

800 CONSUMIDORES

La red de distribución de gas de Caspe tiene una longitud aproximada de 11.900 metros y da suministro a casi 800 consumidores, según datos aportados por Endesa.

El gasoducto de transporte a Caspe parte de una ampliación de la posición de cabecera del gasoducto de Cuencas Mineras. Está construido en acero al carbono de 10 pulgadas de diámetro, operará a una presión máxima de 50 barios y tiene una longitud de 7,427 kilómetros, que discurre íntegramente a través del término municipal de Caspe. Además del tendido de la tubería principal se han construido dos posiciones, una de origen con trampa de rascadores y otra final con derivación a Caspe.

Una vez construido el gasoducto, Gas Aragón inició los trabajos de ejecución del proyecto de antena de distribución a la población, así como la conversión de las instalaciones del casco urbano para que puedan utilizar gas natural. Esto va a permitir desmontar el depósito de GLP de la población y en consecuencia la supresión del tráfico de los camiones cisterna que realizan su abastecimiento, mejorando la calidad y seguridad del suministro.

El Gobierno de Aragón ha financiado el 15 por ciento de los 278.000 euros invertidos por Gas Aragón para la construcción de la antena de distribución hasta el casco urbano.

El gasoducto a Caspe forma parte del plan de construcción de gasoductos de transporte de gas natural desarrollado por Endesa Gas Transporte y Distribución, con el objetivo de facilitar el acceso de nuevos clientes a esta fuente de energía en Aragón.

Durante los dos últimos años la compañía ha construido en Aragón 136 kilómetros de infraestructuras de transporte de gas natural, entre las que destacan los gasoductos Bárboles-Sobradiel, El Burgo de Ebro-La Puebla de Alfindén y los que van a permitir iniciar la distribución de gas natural a las poblaciones de Alcolea de Cinca, Borja, Belchite y Mequinenza, con una inversión superior a 35 millones de euros.

Endesa Gas Transporte y Distribución opera más de 550 kilómetros de gasoductos de transporte en Aragón, entre los que se encuentran los de Cuencas Mineras, el gasoducto Azaila-Albalate-Ariño, en la provincia de Teruel, el de Fraga en el Alto Aragón y los gasoductos Zaragoza-Calatayud y Gallur-Tauste-Ejea de los Caballeros en la provincia de Zaragoza.

Todos ellos se encuentran conectados con el Centro de Control de Endesa Gas Transporte y Distribución en Zaragoza, lo que permite conocer en tiempo real los principales parámetros de funcionamiento de las instalaciones.