Los fondos del plan PIVE para la compra de coches se agotan dos meses antes de lo previsto

Los fondos del plan PIVE (que incentiva la compra de coches energéticamente eficientes) están a punto de agotarse, dos meses y medio antes de lo previsto (la fecha consignada para su extinción era el 31 de marzo de 2013).

Según las principales asociaciones empresariales del sector del automóvil (Anfac, Aniacam, Faconauto y Ganvam), el PIVE ha hecho posible alcanzar 700.000 matriculaciones en 2012, mientras las redes de distribución han mejorado su situación, al aumentar el tráfico en sus exposiciones un 60% entre los pasados meses de septiembre y diciembre. También se ha roto la tendencia de destrucción de empleo.

Para evitar que el mercado vuelva a caer en la atonía de los últimos años, las patronales del sector  han solicitado la renovación del plan, dotado con 75 millones de euros.

A juicio de estas asociaciones, el programa "es bueno para la sociedad y la economía y, gracias al retorno fiscal, contribuye a luchar eficazmente contra el déficit público". Además, recuerdan en un comunicado conjunto que el Plan PIVE está teniendo un impacto muy positivo en la economía y en la sociedad. "El Plan, gestionado de forma eficaz por el IDAE con el apoyo de fabricantes y concesionarios, está cosechando un rotundo éxito".

Pero la prorrogación del plan está en el aire. El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha afirmado en que el Gobierno renovará el Plan PIVE, siempre que haya dinero en su Departamento. Soria reconoce que están satisfechos con los resultados, pero su renovación depende de "la disponibilidad de fondos".

El Plan PIVE contempla una ayuda de 2.000 euros (mil con cargo al presupuesto del IDAE y otros mil aportados por las marcas) para la compra de un coche de categorías de eficiencia A ó B (más del 65% del mercado), a cambio de entregar para el achatarramiento un turismo de doce años o más de antigüedad.