¿Prefiere andar a correr?

En estos últimos años, sí. ¡Ya he corrido mucho! (risas). Andar te permite pensar, observar tu alrededor y aprender.

Este es el disco soñado...

Es producto de la experiencia y sentía que tenía ganas de producirlo. Fue un desafío muy grande que viví con mucha intensidad.

¿Tiene tiempo de pensar en el siguiente álbum?

BIO Nació en 1971 en Buenos Aires. Hijo de la también cantante Lolita Torres, el éxito internacional le llegó con 'Color esperanza'.

No. Los próximos shows me están quitando el sueño. El 10 y 11 de noviembre debutamos en un estadio de fútbol de Buenos Aires.

¿Qué papel juega el directo?

Hago los discos pensado que van a llegar al escenario. Los trabajos se deben defender en directo. Me encantan las giras, subirme al escenario, transmitir las canciones a la gente y recibir su energía.

¿Andando es más vitalista?

Tiene mucho contraste. En los últimos cuatro años perdí a mi madre, tuve un accidente donde murió un gran amigo, y todo combinado con las giras. No había tiempo de parar y yo sentí que no había que hacerlo.

¿Cómo se encuentra ahora?

Mejor. Este disco me ha servido un poco de catarsis.

Cuenta con invitados de lujo: Juan Luis Guerra, Joaquín Sabina...

Como me dijo un periodista: «Tú estarás en medio del ángel y el demonio» (risas). Son dos artistas con los que crecí y me he nutrido de su poesía.

¿Se siente más próximo a Sabina que a otros solistas latinoamericanos?

El camino es estar en medio y no perder la esencia. He buscado mi propio sonido: Diego Torres suena a la fusión que hay en mi vida.

Habla de las cosas difíciles desde el punto de vista del optimismo. Complicado, ¿no?

Siempre voy a cantar que ante la adversidad hay que seguir adelante. ¿Qué sentido tiene pasar derrotados por esta vida?

Es de los artistas que más vende en Argentina. ¿Es el Maradona de la música?

(Risas). Qué sé yo. Estoy muy agradecido al público de mi país que me ha hecho popular y me ha permitido ser profeta en mi tierra. Estrenar un disco en un estadio de fútbol… Sé que no es normal.