El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha valorado el boicot que casi dos centenares de personas, pertenecientes en su mayoría al ámbito estudiantil universitario, han realizado sobre la charla que tenía programada para la tarde de este lunes, subrayando, "sinceramente y sin ánimo de encender a nadie", que, a su juicio, lo ocurrido "llama la atención" sobre la necesidad de una "importante" reforma educativa.

En declaraciones a los periodistas, Wert ha hecho una defensa de la educación como "una formación integral que incluye, entre otros elementos, los valores de la tolerancia y el respeto, el principio del argumento por encima del grito y la descalificación o la capacidad de escuchar los argumentos del oponente por lejos que se encuentre uno de ellos".

"La orientación general de nuestra Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) va justamente en esa dirección", ha reivindicado el titular estatal de Educación, Cultura y Deporte, que ha resaltado la conveniencia de "aprender a discutir civilizada y educadamente, que sepamos entender que incluso las opiniones del adversario pueden tener una parte de verdad".

Para el ministro, "todo es susceptible de ser dialogado". Ha añadido que "la palabra es preferible al grito y al insulto, y ésta, desgraciadamente, no ha podido ser escuchada en Sevilla".

Wert ha lamentado "profundamente" que la gente que hubiera venido a escuchar, ya estuviera en acuerdo o en oposición a la proyectada reforma educativa, no haya tenido la oportunidad de hacerlo. Con todo, ha reafirmado la voluntad de su departamento de sacar adelante la normativa "sobre la base de mucho diálogo, debate y confrontación de ideas, todo aquello consustancial a la educación y que en un contexto democrático de desarrollar el espíritu critico y la tolerancia es estar en capacidad de escuchar y aceptar las opiniones de los demás, pero para ello es imprescindible tener la posibilidad de escuchar estas opiniones".

El ministro, que ha expuesto que es la primera vez que le acontece un incidente de estas características, ha remarcado que "lo que a uno no le debe llevar un ejercicio de intolerancia y fascismo como el que han protagonizado quienes han impedido que el acto se desarrollara con normalidad es a arrepentirse, a aquellos que tenemos convicciones democráticas y basamos en el diálogo el comportamiento político". "Mediante el grito y la intolerancia no se puede llegar a ningún sitio", ha apostillado.