El euro por receta recibe más de 4.500 insumisiones en su primera semana en vigor

Una manifestante muestra, dentro de una farmacia, una guía rápida sobre cómo no pagar la tasa.
Una manifestante muestra, dentro de una farmacia, una guía rápida sobre cómo no pagar la tasa.
Miquel Taverna
Una manifestante muestra, dentro de una farmacia, una guía rápida sobre cómo no pagar la tasa.

La tasa de un euro por receta que entró en vigor el pasado 1 de enero en la Comunidad de Madrid ha recibido miles de insumisiones en la primera semana de aplicación de la medida.

El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM), Alberto García Romero, informó este jueves de que los formularios oficiales que la propia Consejería de Sanidad repartió en las farmacias para objetar se han agotado en un tiempo récord.

"Estamos llegando al límite de la burocracia", alertó García, quien también detalló que las 4.500 negativas por mes que la medida ha registrado en Cataluña, donde la tasa también se aplica, han sido superadas en Madrid en solo siete días.

El consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty, aseguró que esas cifras son falsas, pero no porporcionó las que considera correctas. Sí informó, en cambio, de que desde el 1 de enero se han emitido 1.379.000 recetas sometidas a gravamen que corresponden a 379.000 pacientes.

Facua duda que se reclame

El portavoz de la Federación de Consumidores Facua-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, mostró su preocupación porque "faltan impresos en las farmacias" y porque los usuarios "tengan miedo a no pagar" porque no conocen en qué consiste la posible multa por insumisión.

La organización "duda mucho" que la Administración regional lleve a cabo la reclamación del euro por receta con recargo a quienes no lo abonen porque los costes del procedimiento serán "infinitamente más caros" que los 1,20 euros que recibirían del ciudadano.

"Si la Administración despilfarra dinero público en perseguir a los usuarios, gastará más de lo que va a recaudar con el euro por receta", aseguró Sánchez, que calificó la medida como "una multa" para "penalizar al que está enfermo".

El rechazo a la medida parte desde el propio Ejecutivo de Mariano Rajoy, que ya ha anunciado que recurrirá la medida al Tribunal Constitucional por invasión de competencias.

El dinero no volverá al paciente

La Comunidad de Madrid, pese a todo, se niega a retirar el gravamen. Además, el presidente regional, Ignacio González, aseguró este jueves que no devolverá los importes cobrados aunque el Constitucional lo declare ilegal.

González insistió en que es una ley que ya se ha puesto en marcha en la Comunidad de Madrid y que, en caso de que se recurra, dejará de ser efectiva a partir del momento en que el alto tribunal se pronuncie al respecto.

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