La Policía Local de Zaragoza ha cerrado la campaña especial de vigilancia de Navidad con la realización de 2.553 pruebas de alcoholemia, de las que 123 (4,8 por ciento) fueron positivas y 2.430 negativas. Los controles se realizaron desde el 10 de diciembre hasta el 7 de enero, y se sumaron a los que practicó la Dirección General de Tráfico (DGT) hasta el 23 de diciembre.

Esta intensificación de la vigilancia en las fiestas de Navidad es ya una medida habitual todos los fines de año, ya que se trata de una época en la que se incrementa la movilidad en las ciudades, así como la ingesta de alcohol. Los controles tienen como finalidad reforzar la seguridad vial, y desincentivar la conducción cuando se hayan tomado bebidas alcohólicas o cualquier estupefaciente.

Según los datos facilitados por el Ayuntamiento de Zaragoza, de las 123 pruebas positivas, 85 han sido administrativas, es decir, se han detectado niveles de alcohol por debajo de los 0,60 mg por litro de aire espirado y serán objeto de sanción económica y de retirada de puntos del carnet de conducir, y 48 penales, que suponen detención y juicio rápido. De este bloque de pruebas positivas, 30 lo fueron por conducir con síntomas claros de haber ingerido alcohol; 15 por superar la tasa penal establecida y 3 por negarse al sometimiento de las pruebas.

La Policía ha realizado estas pruebas de manera aleatoria y en cualquier punto de la ciudad. Los datos registrados en los últimos tres años confirman una tendencia a la baja en las pruebas positivas, lo que indica una mayor concienciación de los conductores a la hora de circular.

Además, de las pruebas de alcoholemia se practicaron 16 test de drogas, de los que 10 tuvieron un resultado negativo y 6 dieron positivo.