El grupo de afectados por participaciones preferentes y obligaciones subordinadas de Novagalicia Banco de Santiago que en las últimas semanas redobló sus protestas ha trasladado este martes sus reivindicaciones al interior de las oficinas centrales de la entidad, en la compostelana Praza de Galicia.

Un día después de que una concentración provocase el cierre de la sucursal, los responsables de seguridad han permitido acceder al interior de la oficina a los afectados. Los participantes en la protesta, una veintena, han hecho sonar bocinas y pitos durante casi cuatro horas, entre las 10.00 y las 14.00 horas, lo que aseguran que hizo que la sucursal no tuviese apenas clientes.

"La gente da media vuelta", ha señalado a Europa Press uno de los afectados, Antonio Sánchez, quien confirma que este miércoles repetirán la actuación y el jueves lo harán por la tarde. "Así todos los días del mes, no vamos a parar hasta que esta gente nos escuche y nos devuelvan el dinero", ha destacado, antes de advertir que "va a ser difícil porque hay mucho ladrón suelto".

Miembros de la plataforma de afectados de la capital gallega realizaron concentraciones durante la última semana de diciembre frente al Ayuntamiento de la ciudad, en la Praza do Obradoiro, y también estuvieron presentes en el acto al que acudió el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el pasado viernes.

Con anterioridad, protagonizaron, asimismo, un corto encierro en la sede del Instituto Galego de Consumo, que se encarga del arbitraje por el que más de 11.000 titulares de estos productos financieros recuperaron sus ahorros.