Los trabajadores del Parador de turismo de la capital turolense no se encuentran satisfechos con el acuerdo alcanzado esta madrugada sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en la red de paradores al ser el restaurante de este hotel de alta categoría uno de los que cierre temporalmente. Sin embargo, el Parador de Teruel se ha salvado del cierre junto con los de Arcos de la Frontera, Almagro, Manzanares, Oropesa, Benavente, Gredos, Tordesillas y Ferrol.

Concretamente, el restaurante del Parador de Teruel cerrará cinco meses al año y durante este tiempo no estará abierto a la hora del almuerzo, si bien se verá ampliada la oferta de su cafetería. Esta decisión ha sido tomada en la última reunión en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), entre los responsables de Paradores y del Comité Intercentros, formado por CC.OO. y UGT, una medida que tendrá efecto desde este mismo mes de enero.

El delegado sindical en el Parador de Teruel por Comisiones Obreras, José María Villarejo, ha indicado que "el parador no se cierra, pero se cierra el restaurante para los almuerzos durante cinco meses, que en un principio iban a ser cuatro, y va a suponer que perdamos clientes, que entren menos ingresos, y es un paso de cara a la privatización", ha apreciado.

Este cierre temporal del restaurante afectaría a doce trabajadores pero "desconocemos todavía si va haber despedidos aunque creemos que sí los habrá", ha advertido.

El acuerdo alcanzado rebaja también el tiempo de duración de los cierres parciales previstos en un primer momento para 27 establecimientos. Así, frente a los cinco meses previstos inicialmente, el cierre afectará a una veintena de establecimientos y será de tres o cuatro meses en casos concretos y del periodo de vacaciones, establecido en 40 días, para la mayoría de ellos.

Así, el parador de Alcañiz se encontrará cerrado 40 días al año, como también lo estarán los centros de Aiguablava, Artíes, Cardona, la Seu D' Urgell, Vic Sau, Vielha, Guadalupe y Monforte de Lemos.