El Boletín Oficial de Cantabria (BOC) publica este 31 de diciembre el decreto por el que se crea la Oficina de Supervisión Integral del Gasto del Sector Público Autonómico de Cantabria, órgano que depende del presidente regional y que entrará en vigor este 1 de enero.

Con su puesta en marcha, el Gobierno de Cantabria pretende "implantar de manera coordinada" en todo el sector público, la austeridad, mediante la obtención de la máxima eficiencia en la asignación y utilización de los recursos públicos en toda actuación pública relevante que lleve aparejada un gasto.

Dado que este principio de austeridad y de eficiencia en la utilización de los recursos públicos "deberá presidir toda actuación pública", el Gobierno considera "imprescindible" que el nuevo órgano dependa del presidente del Ejecutivo regional.

La Oficina de supervisión integral del gasto asistirá a todas las consejerías y al resto del sector público para la consecución de los objetivos y directrices fijadas por el Gobierno.

Para ello, los funcionarios públicos que vayan a prestar servicios en esta unidad se formarán en programas de agregación de la demanda, ordenación de la información, valoración de datos y optimización de recursos mediante economías de escala.

A la Oficina se le encomienda el estudio, análisis, evaluación y propuesta de la actividad del sector público autonómico que puede generar gasto, en relación con el cumplimiento de los principios de economía, eficacia y eficiencia.

En definitiva, en su actuación deberá de adecuarse a los actuales recursos económicos, con la premisa de procurar la obtención de mejores resultados, a fin de aumentar la productividad y mantener el "nivel óptimo" de la prestación de los servicios públicos de Cantabria.

Como órgano gestor de esta política, se pretende así garantizar, según el Gobierno, la "uniformidad" en la aplicación de los criterios de gestión pública derivados del Plan de Gestión y Control Integral del Gasto del Sector Público Autonómico, y "reforzar la coordinación y homogeneidad de las decisiones que puedan generar un gasto".

Además de los órganos necesarios para el desarrollo de sus funciones, un órgano colegiado apoyará a la nueva Oficina en sus funciones, cuya composición "será parcialmente variable" en función del departamento de la administración del que dependa la actuación que va a ser analizada y valorada por el nuevo órgano.

El Ejecutivo regional ha reconocido que la implantación efectiva este nuevo modelo de gestión integral del gasto supone una "extraordinaria complejidad" pues incluye la adopción de normas de desarrollo, nuevos procedimientos y una adecuada formación por parte de los funcionarios usuarios del sistema. Por ello, el Gobierno de Cantabria ha dispuesto su "implantación gradual" en el seno de la Administración Autonómica.