La conselleira de Traballo e Benestar, Beatriz Mato, ha avanzado este miércoles que los presupuestos para 2013 incluirán un aumento del 38% de los fondos reservados para la Renta de Integración Social (Risga).

Así lo ha dicho en declaraciones a los medios tras reunirse, acompañada por la directora xeral de Familia e Inclusión, Amparo González, con representantes de la Federación Galega de Bancos de Alimentos.

Mato ha explicado que el encuentro es el primero de "una ronda de reuniones" que su departamento prevé mantener en enero con diferentes agentes sociales para "caminar en la efectividad de los fondos públicos destinados a atender a las personas que más lo necesitan" y a las entidades que trabajan en este ámbito.

Para la Xunta, ha sostenido, "es importante dar respuesta a las personas" que se encuentran en el límite de la exclusión o en situación de exclusión social, para lo que el Gobierno gallego ha decidido aumentar en un 38% —respecto a 2012— la dotación para la Risga en los presupuestos de 2013, cuyo proyecto será aprobado este jueves en el Consello.

Las cuentas para el próximo ejercicio incluirán, así, "un incremento importante para dar respuesta a las personas que más lo necesitan". La intención, ha incidido, es "dar respuesta a estas personas que necesitan esta renta". "Así lo hicimos en 2012, cuando, de hecho, incrementamos en 4 millones de euros a lo largo del año la partida destinada a dar respuesta a la Risga", ha argumentado.

Además, el objetivo de la consellería es "no solo facilitar una respuesta económica a las personas que lo necesitan, sino también trabajar para que sea un momento temporal en sus vidas" y evitar que la situación "se cronifique". Para ello, ha defendido Mato, la ayuda debe, además de ser un respaldo económico, promover su inserción en el mercado laboral.

Es por ello que en el próximo semestre volverá a entrar en el Parlamento de Galicia la nueva ley sobre la Risga —ya se había remitido, pero con el parón legislativo hay que volver a presentar el proyecto—. La modificación, ha asegurado la conselleira, pretende que la renta de integración social sea "un vínculo con el mundo laboral" y contribuya a "evitar esa cronificación".

La propuesta de la Xunta es que la renta sea compatible con trabajos temporales o de baja remuneración y establecer tres tramos, el personal y familiar, el de inserción y el de transición al empleo.

Más reuniones

La conselleira de Traballo e Benestar ha señalado que en las próximas semanas mantendrá más reuniones sobre este tipo de ayudas y ha explicado que desea firmar convenios que sean nominativos y respaldar con recursos públicos a las entidades que trabajan "en favor de las personas que peor lo están pasando".

Además, en la reunión de este miércoles Mato ha aprovechado para presentar a la directora general de Familia e Inclusión a la Federación de Bancos de Alimentos y para "explicar el porqué" de un departamento con ese nombre. Las razones, ha dicho, son la importancia que dan a "estar cerca de las personas que están al borde de la exclusión social" y a "trabajar a destajo por la dinamización demográfica".