Los afectados por las preferentes de Novagalicia Banco que mantienen encierros en las localidades pontevedresas de Gondomar, Moaña, Cangas y O Rosal pasarán las fiestas navideñas turnándose para mantener sus actos de protesta y, además, también se están organizando para tomar las uvas en Nochevieja.

En el caso de O Morrazo, en la mañana de Nochebuena los afectados de Cangas realizarán una obra teatral sobre un "desahucio", con personajes como un Guardia Civil y un agente judicial; y, para la noche, han diseñado turnos más cortos para que cada uno de los afectados que mantienen el encierro en un cajero de Novagalicia Banco puedan ir a su casa y pasar un tiempo con sus familias.

Según explicó una de las afectadas, María Barreiro, en declaraciones a Europa Press, el encierro para reclamar que se les devuelvan su dinero va a seguir de forma indefinida y pese a las fechas festivas. "No por ser Navidad se nos quitan las ganas, tenemos más si cabe", aseguró esta afectada, quien reconoció que estas Navidades están siendo "un poco más amargas", pero que tampoco se puede perder el espíritu.

En Cangas no realizarán tradicionales comidas navideñas, sino que las personas a las que les corresponda, por turno, mantenerse en el encierro, realizarán sus comidas al igual que en días anteriores. En principio, no tienen previsto nada especial, si bien no se descarta que, como en anteriores ocasiones, algún vecino acuda a llevarles algún detalle.

Barreiro avanzó que, si bien en Navidades no tienen previsto nada especial, en Fin de Año sí comerán las uvas en el encierro. En ese sentido, ha indicado además que los afectados "aceptan visitas" por si responsables del Ayuntamiento quieran pasarse también por allí.

En el caso de Moaña, donde también se mantiene un encierro en un cajero, la previsiones van en la misma línea que en Cangas, pasando tanto la Navidad como Nochevieja.

GONDOMAR

En Gondomar, donde el encierro para reclamar la devolución del dinero se ha trasladado desde un cajero de Novagalicia hasta las instalaciones del Ayuntamiento, los afectados sí prevén realizar una cena un tanto especial en el turno de esta noche.

En declaraciones a Europa Press, Rocío Cambra, una de las afectadas, explicó que la idea es "cenar como en casa" pero en el lugar del acto de protesta. Así, unas 15 personas permanecerán en el encierro y se alimentarán con alimentos típicos de estas fechas y, después de la cena, se les unirán al postre y al café otros afectados.

En el caso del día 25, los afectados prevén realizar turnos más cortos en el encierro, de forma que cada uno pueda quedarse más tiempo en casa para estar con la familia.

Para Fin de Año, su idea es colocar una carpa para que puedan acudir los vecinos que, a medianoche, quieran tomar las uvas junto a los afectados. Según explica Cambra, esa carpa funcionará a modo de "Puerta del Sol" madrileña "en miniatura".

Esta afectada ha indicado que la idea de permanecer encerrados indefinidamente se mantiene "totalmente" al igual que desde el primer día, cuando fue ocupado un cajero de la entidad bancaria. Ahora, han decidido cambiarse para el Ayuntamiento, pues consideran que la solución para ellos debe venir de la entidad pero también ser de tipo "político".

O ROSAL

Por su parte, los vecinos de O Rosal afectados por las preferentes que permanecen en el Ayuntamiento también han decidido que no abandonarán el encierro pese a las fiestas, sino que las pasarán en el Consistorio.

Según explicó uno de los afectados, Xulio Vicente, el grupo que se queda esta noche cenará los platos que les llevará el Restaurante Aparthotel Marouco en O Castro, del municipio de A Guarda; que ya en anteriores ocasiones mostró su apoyo al grupo cediéndoles empanadas.

Para Fin de Año, según explicó Vicente en declaraciones a Europa Press, ya hay "un par de familias anotadas" para pasar la Nochevieja en el encierro, si bien se espera que se unan más personas a lo largo de esta semana. "Harán lo mismo que en sus casas, pero encerrados en el Ayuntamiento", explicó.

Además del encierro, los afectados del Baixo Miño siguen reuniéndose con alcaldes de la comarca y a la espera de gestiones por parte de estos. Los afectados quieren mantener un encuentro con responsables del banco y también de la Xunta.