Las lluvias y los vientos que mantienen en alerta a numerosas provincias españolas seguirán presentes a lo largo del fin de semana, si bien su intensidad comenzará a remitir a partir del domingo salvo en el noroeste peninsular y zonas de Castilla y León y Cáceres, según ha explicado a Europa Press el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Alejandro Lomas.

El viernes será el día donde más alertas se registren por estos fenómenos, debido a un frente que se desplaza hacia la mitad noroeste peninsular. La zona del sureste será la única que no sea alcanzada por este frente que traerá el viernes precipitaciones y vientos que en algunas parte del norte alcanzarán los 110 kilómetros por hora.

El sábado continuarán las lluvias, principalmente en la vertiente atlántica peninsular, Pirineos y Andalucía, acompañadas de vientos fuertes en zonas altas y en el noroeste de la Península, aunque la fuerza de estos fenómenos tenderá a bajar a lo largo del día. La cota de nieve se situará en torno a los 1.500 metros y así continuará durante la semana.

Por su parte, el domingo comenzarán a remitir las lluvias, si bien permanecerán de forma débil a moderadas en Galicia, la zona del cantábrico, Pirineos, Cáceres y el oeste de Castilla y León. Asimismo, los vientos únicamente soplarán en escasas provincias flojos a moderados, mientras que las temperaturas apenas registrarán cambios.

La tendencia para la próxima semana será la de inestabilidad, alternando precipitaciones —sobre todo en Galicia— con días sin lluvias, debido a que la Península será una zona de pasos de diversos frentes. No obstante, las temperaturas subirán ligeramente debido a la entrada de una masa templada de aire.

En cuanto al balance hídrico, se mantiene, a fecha de 11 de diciembre, con un superávit del 26 por ciento, ya que a estas alturas del año hidrológico (desde el 1 de octubre) ha llovido 215 litros por metro cuadrado, cuando el valor normal sería 170 litros por metro cuadrado.

Las zonas de mayor superávit son áreas del tercio sur peninsular, la cuenca del Ebro, amplias zonas del sureste de Andalucía, Canarias (salvo Lanzarote y Fuerteventura) y Alicante. Mientras, hay valores por debajo de lo normal en Galicia y el noroeste peninsular.