En lo que llevamos de legislatura, es decir, desde diciembre de 2011, los 350 diputados del Congreso han formulado 12.735 preguntas escritas al Gobierno y 596 preguntas orales en Comisión, muy alejadas, por el momento, a las 108.000 que se hicieron en los tres años y medio de la anterior legislatura.

Sus señorías preguntan de los temas más variopintos, ya que la política abarca todos los ámbitos de la sociedad y para tratarlos el Congreso se divide en 31 comisiones y cuatro subcomisiones. Pero algunas cuestiones son tan insólitas que se merecen un premio. La Asociación de Periodistas Parlamentarios escoge cada año las mejores. En 2012 las finalistas son cuatro. Bajo la categoría 'la pregunta del millón', la ganadora será elegida este martes.

Las cuatro candidatas son muy originales: dos diputados de CiU han mostrado su preocupación por los músicos profesionales que viajan en avión con sus instrumentos y no pueden llevarlos con ellos en la cabina; y en la clase de ratas que se están comiendo los cables de señalización de tren en la estación de Sant Miquel de Fluvià (en Girona).

La más llamativa quizás sea la de Laia Ortiz, de Izquierda Plural, que preguntó al ministro Cañete (Agricultura) por el libro que editó su Ministerio, La vegetación de la Biblia: "¿Comparte el Gobierno la opinión del autor sobre que la manzana de Adán y Eva debió ser un albaricoquero, un naranjo amargo, un pomelo o un membrillero, ya que el manzano no es originario de Palestina ni parece que exista asilvestrado en sus montes?".

Si atendemos a la media estadística, cada diputado ha formulado 38 preguntas este año. Nada más lejos de la realidad. El socialista y exministro Alfonso Guerra, por ejemplo, no ha hecho ninguna.