El diputado socialista en las Corts Valencianes Josep Moreno ha asegurado este miércoles que la sentencia del Tribunal Supremo que anula el cese de las emisiones de TV3 en la Comunitat Valenciana y la sanción de 300.000 euros impuesta a Acció Cultural del País Valencià (ACPV) por reemitir la señal supone "la condena al fanatismo político de un gobierno, como el de Fabra, obsesionado en la manipulación informativa".

El parlamentario socialista ha indicado en un comunicado que el Consell "se empeña en controlar antidemocráticamente qué tienen que saber, qué tienen que leer o escuchar o qué tienen que ver en la televisión los ciudadanos de la Comunitat Valenciana". A juicio de Moreno, con esta decisión "se recupera algo más que un canal de televisión, se recupera más pluralismo, más información, más libertad de expresión".

Además, ha recordado que esta sentencia se suma también a otra de este mismo tribunal "que ya invalidó la concesión corrupta de las TDT valencianas por parte del gobierno de la Generalitat y que se concedió a las tramas Gürtel o Brugal, por ejemplo".

Moreno ha calificado la situación como "una vergüenza más" que, según ha dicho, "se tiene que añadir a la insoportable situación de Radio Televisión Valenciana (RTVV) que, en estos momentos, está sin gobierno, sin audiencia y manipulada". En su opinión, la televisión "se ha utilizado para robar a los valencianos 1.300 millones de euros en supuestas tramas de corrupción".

Para el diputado socialista, "son tiempos de mucha vergüenza, donde la televisión valenciana ha tenido una gestión vergonzosa como vergonzoso también ha sido el gobierno que lo ha dirigido". Moreno ha señalado que el Consell "quiere ahora que todo este desastre lo paguen 1.200 familias valencianas", en referencia al número de trabajadores afectados por el Expediente de Regulación de Empleo de RTVV.