Cerca de cuarenta técnicos de Educación Infantil se han concentrado este jueves en la Plaza Porticada de Santander para denunciar que la situación de las aulas de 2 años en Cantabria es "cada vez peor" y que "todos" sus contratos "penden de un hilo".

Con pancartas con lemas como 'La educación no es un negocio', 'Rescatemos + escuelas y - bancos' o 'Las familias necesitan las aulas de 2 años', entre otras, y ataviados con silbatos, los técnicos de Infantil, unos 170 en Cantabria, se han quejado de la "precaria" situación que padecen "desde hace 8 años" y la "inestabilidad" de sus puestos de trabajo y de sus contratos que dependen, o bien de empresas de trabajo temporal o de los ayuntamientos.

En declaraciones a los medios de comunicación, la portavoz de la Asociación de Técnicos de Educación Infantil de Cantabria, Beatriz Cueto, ha hecho un llamamiento a la Consejería de Educación para que "asuma íntegramente" a todos ellos.

Además, ha criticado a la subcontrata Clece, la encargada de hacer las contrataciones este año, por las "condiciones bastante lamentables" que está ofreciendo a los técnicos.

También, esta portavoz ha pedido el regreso de los técnicos que estuvieron el pasado curso y que en el presente se han quedado "en la calle" y han sido sustituidos por otros nuevos.

Cueto ha señalado que los técnicos de Infantil de Cantabria no tienen "garantizado" ni siquiera este curso y van a trabajar "día a día" sin saber si al siguiente podrán seguir yendo.

Ha explicado que están "a la espera" de que vuelva a salir un concurso nuevo de adjudicación después de que el anterior quedara desierto.

Por otra parte, se han quejado de que, a pesar de trabajar en colegios públicos, sus contratos se rigen por convenios totalmente privado, y piden uno que sea "acorde" con ello.