La agencia de calificación crediticia Fitch ha avisado este jueves de las dificultades que se presentan para las cuatro entidades nacionalizadas, entre ellas Novagalicia Banco, para aplicar los planes de reestructuración y particularmente en la venta de actividades no estratégicas y de sus carteras de renta fija, debido a las débiles condiciones en los mercados.

Además, apuesta por una "polarización" de la banca española entre entidades fuertes y débiles después de que la Comisión Europea aprobara este miércoles los planes de reestructuración de las entidades nacionalizadas.

Así, la agencia espera que los bancos que necesitan sanear sus balances se verán forzados a 'adelgazar' considerablemente, principalmente mediante ventas de activos, mientras que las entidades más fuertes ganarán cuota de mercado a raíz de esto y se verán beneficiadas por una "fuga hacia la calidad".

No obstante, Fitch señala que esta continuada reestructuración, que resulte en un sector más fuerte, podría devolver la confianza de los depositantes e inversores.