Una mujer de 39 años ha dado a luz de forma natural a una niña en el Hospital del Vinalopó (Elche) después de haber sido intervenida "con éxito" de una operación del corazón en la semana 20 de gestación, cuando se le practicó un triple 'bypass' coronario en el mismo centro sanitario, según ha informado en un comunicado el hospital.

En la atención a la paciente han colaborado de "forma determinante" los servicios de Cirugía Cardíaca, Cardiología, Anestesia, Medicina Intensiva y Obstetricia. El centro ha resaltado que el cuadro médico de la mujer, los riesgos de la intervención y el éxito en el proceso clínico tanto de la madre como de la bebé "hacen que este caso sea absolutamente excepcional, ya que sólo se han dado cinco casos similares en el mundo".

La paciente padece una hipercolesterolemia familiar y en 2006 presentó un cuadro de angina de pecho, por lo que se le realizó un cateterismo cardíaco en el que se le implantaron tres 'stents' para corregir una obstrucción en otras tantas de sus "principales" arterias coronarias.

Posteriormente, el pasado 20 de junio, la mujer, madre de un primer hijo y por entonces embarazada de 20 semanas, acudió al hospital aquejada de un nuevo cuadro de angina de pecho inestable, que motivó que, tras varias exploraciones cardiológicas, se le detectara una progresión de su enfermedad que afectaba de forma "crítica" al tronco coronario y a otras tres arterias del corazón.

Ante esta situación, que según ha indicado el centro "ponía en serio peligro" la vida de la paciente, los servicios de Cardiología y Cirugía Cardíaca determinaron la necesidad de realizar un 'bypass' "sin demora". Esta operación trata de reestablecer el flujo sanguíneo de las arterias coronarias obstruidas mediante el uso de injertos vasculares —arteriales o venosos— del propio paciente, y tiene el objetivo de resolver y prevenir las principales complicaciones de la enfermedad coronaria como la angina de pecho, el infarto y la muerte súbita.

Riesgo de parto prematuro

El Hospital del Vinalopó ha subrayado que han sido publicados "pocos casos" de este tipo de intervención en embarazadas, donde el riesgo materno es "bajo" pero el de pérdida fetal y parto prematuro es "significativamente mayor". "De ahí la necesidad de lograr un tratamiento adecuado de la cardiopatía materna con la mínima agresión y estrés para el feto, con especial dificultad al tratarse de una gestante de 20 semanas", ha añadido.

En cuanto al "abordaje multidisciplinar" de la intervención, el centro ha expuesto que "para preservar las condiciones fisiológicas de la circulación materno-fetal", la operación fue realizada "a corazón abierto", sin circulación "extracorpórea", al tiempo que se llevó a cabo un "estricto control" para asegurar una adecuada función cardíaca y pulmonar.

Por su parte, médicos del Servicio de Medicina Intensiva y de Obstetricia monitorizaron a la madre y al feto respectivamante, antes, durante y después de la intervención, comprobando que no existían complicaciones maternas, signos de sufrimiento fetal ni riesgo de parto prematuro. Igualmente, el postoperatorio transcurrió "favorablemente" y la paciente fue dada de alta a los cinco días de la operación.

Finalmente, el pasado 15 de noviembre, la mujer dio a luz a una niña sana de 3,285 kilogramos, sin presentar ningún problema de índole cardiológico ni de obstetricia. Tanto la madre como la niña abandonaron el hospital "en perfecto estado" dos días después.