El Gobierno de Cantabria ha procedido al traslado del elefante africano Pambo, que llegó en 2009 con fines reproductores al Parque de la Naturaleza de Cabárceno procedente del Zoológico de Viena, al parque zoológico Bioparc de Valencia.

Este traslado, que se llevará a cabo el próximo martes, día 27, es consecuencia de una recomendación realizada por el coordinador del Programa Europeo de Protección de Especies en Peligro de Extinción de elefante africano, al cual pertenece Cabárceno y con el que colabora habitualmente, ha informado el Gobierno de Cantabria en un comunicado.

La llegada del animal al Parque cántabro se hizo necesaria como consecuencia de la muerte del anterior macho reproductor, Chisco, y con el fin de evitar que el principal núcleo reproductor de esta especie en Europa que es Cabárceno, parase su "excelente" ritmo reproductor.

Una vez cumplidos los objetivos para los que llegó, habiendo sido padre de dos crías y servido de instructor a los tres machos jóvenes que viven en el Parque, a las que ha mostrado las pautas de comportamiento a seguir ante una hembra reproductora, ahora se "hace necesario" su traslado ante la escasez de machos reproductores probados que hay en Europa.

El Parque de la naturaleza de Cabárceno cuenta con un total de 15 ejemplares de esta especie que conforman la mayor manada estructurada de elefantes africanos que vive fuera de África.

En próximas fechas y como consecuencia del traslado de Pambo, el Programa Europeo de Protección de Especies en Peligro de Extinción de elefante africano trasladará al Parque un nuevo macho probado que haga las veces de semental. Esto permitirá dar continuidad al "exitoso" programa de reproducción de elefante africano que se desarrolla, considerado el más importante a nivel mundial, al ser el zoológico europeo donde más elefantes africanos han nacido en cautividad, 16 en total.

Traslado a valencia con una técnica novedosa

El traslado de un animal de esta corpulencia y fuerza (pesa mas de 6.000 kilos y mide 3,30 metros de alto) requiere la realización de una serie de maniobras "muy peligrosas" tanto para la salud del animal como para la de los cuidadores.

Dado que se hace por carretera y es muy importante que se realice con la mayor rapidez y seguridad, es imprescindible emplear un transporte especial, sobre el que se cargará el contenedor, fabricado expresamente con el propósito de que resista los golpes y los movimientos bruscos de un animal tan fuerte. Para su carga y manipulación se hace preciso el concurso de una grúa de gran tamaño.

Todas estas maniobras requieren de personal muy cualificado y más teniendo en cuenta que se ha optado para su carga, por una fórmula "muy novedosa", destaca el Gobierno, que es la primera vez que se utiliza con machos adultos y que evita los riesgos de la siempre peligrosa anestesia en estos animales tan grandes.

Dado el "alto grado" de entrenamiento con que cuenta Pambo, que es capaz de entender y obedecer más de 20 órdenes distintas dadas por su cuidador, se ha optado por emplear la fórmula de enseñarle a entrar en el contenedor de transporte de forma voluntaria.

Una vez en su interior se le manda que se posicione de una forma aprendida para poder colocarle una cadena convenientemente forrada para evitar que le haga daño, y aminorar así en la medida de lo posible sus movimientos durante el transporte y evitar accidentes.

Anteriormente el traslado se realizaba en las mismas condiciones de sujeción, pero la carga en el contenedor era necesario hacerla con el animal ligeramente anestesiado, lo cual en ocasiones originaba accidentes que ahora se van a poder evitar.

El contenedor se trasladó a Cabárceno hace un mes, periodo en el que se ha conseguido que el animal realice estas maniobras a la perfección. Con el fin de hacer el transporte aún más confortable para el animal, unos días antes se le administrará un tranquilizante que hará que el viaje sea más tranquilo y los primeros días de estancia en Valencia sean menos estresantes para él.