El PAR propone un registro voluntario de aragoneses emigrados que ofrezca ofertas laborales e información de interés

También para apoyar la implantación en la Comunidad autónoma de los proyectos que esas personas estén desarrollando fuera
Alfredo Boné y Manuel Blasco
Alfredo Boné y Manuel Blasco
EUROPA PRESS
Alfredo Boné y Manuel Blasco

El grupo parlamentario del Partido Aragonés (PAR) en las Cortes de Aragón va a proponer en el pleno de este jueves la creación de un registro voluntario de ciudadanos aragoneses emigrados, a partir del cual se les ofrezcan ofertas laborales, información sobre empleabilidad, investigación y datos de otro tipo, así como la posibilidad de mantener la vecindad civil aragonesa, esto último en colaboración con el Registro Civil.

El portavoz del PAR en las Cortes de Aragón, Alfredo Boné, ha explicado en rueda de prensa que se trata de "establecer mecanismos para minimizar" la "sangría" de aragoneses, especialmente jóvenes preparados, que están abandonando la Comunidad autónoma porque "si Aragón pierde esos jóvenes perderá el futuro".

Al respecto, ha apuntado que según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en los primeros nueve meses de 2012 dejaron el territorio aragonés más de 8.000 personas empadronadas en Aragón y el tramo de edad de 30 a 35 años "es donde se registra mayor número de emigrantes".

Son jóvenes aragoneses "bien cualificados" que "se ven abocados a buscar su futuro en el extranjero" y "no vuelven más que para Navidad" porque aquí "no hay trabajo o no es suficiente" respecto a sus expectativas, para señalar que "existen oportunidades", aunque "el momento es el menos favorable, pero hay que aprovechar todos los recursos".

En este sentido, ha precisado que su iniciativa también propone potenciar políticas transversales de incentivo dirigidas al fomento del regreso de los aragoneses que se encuentran fuera de la Comunidad, con la participación de los diferentes Departamentos del Gobierno de Aragón.

Concretamente, apuesta por apoyar la implantación en Aragón de los proyectos que esas personas emigradas estén desarrollando fuera "y sean susceptibles de ser trasladados a nuestra Comunidad, así como aquellas iniciativas y propuestas que puedan emprenderse en la Comunidad autónoma".

Orientar partidas

Boné ha dicho que no se trata de crear una nueva dotación presupuestaria, sino de "orientar las partidas que ya existen" en los campos de la innovación, las energías renovables, el sector agroalimentario, la logística, las actividades turísticas "y otros sectores que pueden ir emergiendo".

A su entender, si "lo tomamos en serio, lo hacemos bien, ese registro sirve" y las iniciativas "cuajan" puede lograrse el objetivo ya que "no nos preocupa solo que los aragoneses tengan que emigrar al extranjero, sino las dificultades para su regreso a nuestra Comunidad, y, especialmente, al mercado laboral aragonés".

Boné ha argumentado que "cada joven que tiene que emigrar es un fracaso de todos y Aragón no puede perder a sus jóvenes y especialmente a los jóvenes más preparados y mejor formados".

El portavoz del PAR ha aportado otros datos del INE, como la previsión para España y Aragón de pérdida de población en los próximos 40 años de un 10 por ciento de la población, un poco menos en la Comunidad aragonesa, que supondrán entre 100.000 y 130.000 aragoneses menos, "en un territorio ya de por sí muy despoblado", con casi un tercio de Aragón con menos de tres habitantes por kilómetro cuadrado, densidad similar a muchas zonas del desierto, y otro tercio que no alcanza los diez habitantes por kilómetro cuadrado.

"Es preciso que las instituciones aragonesas impulsen mecanismos" para realizar ese seguimiento "de este nuevo ciclo de emigración en el que estamos entrando" e "incentivar políticas para el regreso de quienes hayan emigrado", ha incidido.

Todavía hay tiempo

El diputado del PAR, Manuel Blasco, ha apostado por tomar medidas "cuando todavía hay tiempo" para que estas personas "mantengan esa vinculación con la Comunidad autónoma y puedan regresar", para subrayar el "papel" de las casas regionales de Aragón en el exterior en este ámbito.

El parlamentario ha opinado que la vinculación de estas casas debería ser "más estrecha" con el Gobierno de Aragón y ha lamentado la "reducción importante del presupuesto" destinado a ellas en el proyecto de ley de Presupuestos de la Comunidad para 2013, por lo que ha defendido que hay que "potenciarlas y seguir manteniéndolas".

"Lo que se nos está marchando no solo es un capital humano ya preparado, son personas que en muchas ocasiones difícilmente podrán volver", ha dicho, puesto que "no es una emigración coyuntural", que ocurra para mejorar profesionalmente, un idioma o para conocer otros modos de vida, "eso es positivo", sino que "es una emigración que se convierte en crónica, en estructural".

En esta línea, ha recordado la emigración que sufrió Aragón a mitad del siglo pasado, cuando "muchos pueblos se vieron abandonados por personas que se fueron a trabajar a otras Comunidades autónomas".

Concretamente, ha citado los 400.000 aragoneses que hay en Barcelona, "casi más que en Zaragoza", que se fueron también por la falta de trabajo y se ha preguntado "cuál será la aportación de ese capital humano al PIB del Estado".

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