El PP ha defendido este lunes en el Pleno del Parlamento la "negociación discreta" que el Gobierno de Cantabria está manteniendo con el Ministerio de Medio Ambiente para buscar alternativas a la demolición de la depuradora de Vuelta Ostrera. Por su parte, el PSOE ha pedido al Gobierno que "deje de enredad" porque el "enredo", ha advertido, "lo único que puede llevar" es a que ARCA pida la ejecución inmediata de la sentencia del Tribunal Supremo que condenó a la EDAR de Suances al derribo.

El PP, con su voto en contra, hizo que fuera desechada una moción del PSOE cuya finalidad, según relató el diputado Miguel Angel Palacio, es que se sigan garantizando las condiciones ambientales que ofrece hoy en día la depuradora en la ría de San Martín de Suances, y que se mantenga el diálogo y el acuerdo entre las partes implicadas -acuerdo ratificado por el Tribunal Supremo-, sobre la base del cumplimiento de la sentencia.

Palacio reconoció que la demolición de Vuelta Ostrera sin alternativa sería "una ruina ambiental", pero pidió al PP que "deje de jugar al populismo" y ponga sobre la mesa alternativas a un problema -la sentencia del TS- que es consecuencia de un acuerdo del Consejo de Ministros del PP.

El PP rechazó la moción argumentado que su razón de ser es "hablar del pasado, y de responsabilidades más que dudosas" de un Gobierno del PP hace más de 10 años -el "pleistoceno" -dijo-, aunque añadió con ironía que "seguro que su preocupación última es la ría de San Martín".

El diputado Luis Carlos Albalá criticó el "reduccionismo" y las "orejeras" del PSOE, que "lo único" que quiere es hablar de alternativas constructivas, es decir, de ubicación, mientras que en su opinión, "habría que hablar de alternativas a la demolición, en orden al interés general y siendo respetuosos al mismo tiempo con la legalidad".

"Preferimos hablar del más que preferible futuro de Vuelta Ostrera", afirmó categórico, a la vez que señaló que la "negociación discreta" del Gobierno de Cantabria con el Ministerio -el consejero anunció la semana que la alternativa se conocerá a finales de año- podría basarse en "fórmulas para la legalización o tal vez para la amortización a largo plazo".

Por su parte, el PRC, que apoyó la moción socialista, afirmó por boca del exconsejero de Obras Públicas, José María Mazón, que la demolición de Vuelta Ostrera "tendría unas consecuencias más negativas que los propios bienes que ésta pretende preservar" por lo que apeló a una unanimidad que luego no se produciría. "Si cree que la demolición sería una tragedia económica y medioambiental, le recomendaría que vote que no a la moción", espetó el portavoz del PP a Mazón.