El presidente de la Diputación de Lleida, Joan Reñé, se ha preguntado este lunes de forma retórica cuántas personas tienen que morir para que el Ministerio de Fomento construya rotondas en el tramo de la carretera N-240 entre Juneda, Les Borges Blanques y Vinaixa en el que, según sus datos, han muerto 25 personas en cinco años.

"¿Cuánta gente más tiene que morir para que aquellos que son responsables actúen en lo que son sus competencias y sus responsabilidades?" se ha preguntado Reñé, aclarando que se refería así al Ministerio de Fomento, que es quien tiene las competencias de la vía.

"Tengo que manifestar mi más absoluta indignación por la poca sensibilidad que se manifiesta por parte del Ministerio en un hecho tan grave y lamentable, cuando hay personas que pierden la vida", ha declarado.

Ha dicho que mientras se están haciendo otras actuaciones en infraestructuras, "es de una incomprensión absoluta que nadie diga nada cuando se justifica puntos negros con la contundencia que está sucediendo entre Juneda y Les Borges Blanques y Vinaixa".

El presidente de la corporación provincial ha dicho que tenía previsto reunirse con la delegada del Gobierno en Lleida, Inma Manso, para reclamar la inversión: "A ver si tienen un rato para recibirnos".

Tras él último accidente mortal de este sábado, Reñé ha hecho estas declaraciones a preguntas de los medios, en una en rueda de prensa convocada por la Diputación este lunes para presentar el nuevo logotipo de su marca turística 'Ara Lleida'.

Reñé ha recordado que la conversión en autovía de la N-240 para unir Lleida con Tarragona es una reivindicación histórica por la necesidad que tienen las comarcas de la Plana de Lleida de comunicarse con Tarragona, y ha remarcado que además de esta necesidad urgen las rotondas en la vieja carretera para evitar accidentes.