Un español de 25 años falleció este sábado en el aeropuerto de Ciampino, en Roma, tras sentirse mal después de intentar subir a un avión de la compañía Ryanair con destino a Bari (sur de Italia), que supuestamente estaba perdiendo, confirmaron fuentes diplomáticas españolas.

Según la primera reconstrucción de los hechos, sobre las 7.00 hora local (6.00 GMT) el joven, tras haberse saltado el control de acceso al avión, había conseguido llegar a la escalerilla, pero los asistentes de vuelo no le dejaron pasar al no tener la tarjeta de embarque para ese vuelo, puesto que su destino era Barcelona.

Tras la negativa del personal del avión a dejarle entrar, el chico se agarró a la barandilla de la escalera y se negó a bajar por lo que los asistentes llamaron a la policía del aeropuerto.

Según la reconstrucción de Antonio Del Greco, el jefe de Policía de Fronteras del aeropuerto, consiguieron bajarle de la escalerilla, pero "se encontraba muy alterado" y con un comportamiento "violento" por lo que se decidió que acudiese una ambulancia.

Los médicos de la ambulancia le dieron un sedante para calmarle y le colocaron en una camilla, pero poco después en la misma pista el joven empezó a perder el sentido y murió a pesar de que intentaron varias veces reanimarle.

Fuentes diplomáticas españolas explicaron que se cree que M.J.L. sufrió un infarto aunque tendrá que ser sometido a una autopsia para conocer los motivos de la muerte.

El consulado español en Roma se está encargando de informar a la familia y preparando las tareas de repatriación.