La Guardia Civil de Lora del Río (Sevilla) ha detenido a una pareja de jóvenes por un delito de robo con fuerza en las cosas en grado de tentativa y por otro delito de robo con fuerza en las cosas consumado y perpetrado el día anterior, todo ello después de sustraer gran cantidad de alimentos de Cáritas almacenados en la Iglesia de Santa Cruz de esta localidad, según ha informado el Instituto Armado en un comunicado de prensa.

Así, una patrulla de la Guardia Civil se encontraba realizando su trabajo de prevención de la delincuencia y seguridad ciudadana, cuando fue alertada de que se había visto a un hombre joven portando una gran cizalla en las inmediaciones de la Iglesia de Santa Cruz, dándose la circunstancia de que los agentes estaban investigando un robo en la mencionada iglesia que se produjo el día anterior.

Tras romper el candado de la verja que rodea la Iglesia, los sospechosos habían forzado una de las ventanas y roto el cristal. Posteriormente, habían sustraído gran cantidad de alimentos de Cáritas que se encontraban depositados en dependencias de la Iglesia, en espera de ser repartidos entre todas las personas necesitadas que acuden cada día a solicitarlos.

La cantidad sustraída era excesiva para tratarse de un consumo familiar, pues se trataba de 80 botes de cacao en polvo, seis cajas con paquetes de leche de continuación, o diez cajas de aceite de oliva conteniendo cada una seis botellas de litro. Además, y en caso de necesitar comida, los detenidos podían haberla solicitado, por lo que el destino de los alimentos robados no sería el consumo familiar sino "claramente" comerciar de forma ilegal con ellos.

Pues bien, tras ser avisados de la presencia de este hombre en las inmediaciones de la iglesia, los agentes acudieron con rapidez al lugar y observaron a una persona que se dirigía rápidamente a un coche que estaba estacionado allí, y en cuyo interior se encontraba una mujer en el asiento del conductor.

Inmediatamente, se procedió a identificar a estas dos personas y a intervenir la cizalla que porta el hombre, y que era de un tamaño considerable. Los agentes inspeccionaron las ventanas de la iglesia y observaron que, en la ventana cuya reja había sido forzada el día anterior, habían roto completamente los barrotes con lo que parecía ser una cizalla.

Además, se apreció que estos cortes se habían realizado recientemente, posiblemente para intentar sacar objetos de mayor tamaño. Esta ventana comunica con la sala donde se encuentran los alimentos y con el resto de la iglesia.

Una vez recabadas todas las pruebas y entrevistado a los posibles testigos, la Guardia Civil de Lora del Río procedió a detener a J.A.F., de 20 años, por un delito de robo con fuerza en las cosas y otro más en grado de tentativa. También se detuvo a A.M.C., de 23 años, en calidad de cómplice de los hechos delictivos. Ambos son vecinos de Lora del Río.