Jonathan Powell, uno de los firmantes de la Declaración de Aiete y ex jefe del Gabinete de Tony Blair, llegará durante la jornada de este jueves a Euskadi. Su objetivo es preparar la cita que mantendrá el martes de la próxima semana, día 20, en San Sebastián con los partidos políticos vascos, la Iglesia, Patronal y sindicatos para hablar de los acuerdos que se alcanzaron en la Conferencia de Paz de Aiete el 17 de octubre de 2011.

Además, el impulsor de la Declaración de Bruselas y del Grupo Internacional de Contacto (GIC), Brian Currin, se encuentra también en la Comunidad Autónoma Vasca para continuar con sus labores para favorecer el proceso de paz, aunque no asistirá al encuentro de la próxima semana. Currin ha aprovechado que tiene este fin de semana un compromiso en Londres para realizar una nueva visita al País Vasco.

Según informaron a Europa Press fuentes conocedoras de la reunión del próximo martes, Powell presidirá el cónclave, al que han sido invitadas todas las organizaciones que ya participaron en 2011 en la Conferencia de Aiete.

Las mismas fuentes han precisado que no se trata de celebrar un 'Aiete II', como algunos han interpretado, sino que se pretendía desarrollar un encuentro que se desarrollara con discreción. De hecho, la reunión se celebrará a puerta cerrada y sin que se haya convocado a los medios de comunicación.

Sin embargo, sí se están enviando invitaciones a las diferentes formaciones, incluida el PP —que se negó a participar en la cumbre del año pasado—, a la Iglesia, Patronal y centrales sindicales.

Situación política

El objetivo de la cita es analizar el actual panorama político, trascurrido más de un año sin actividades violentas de ETA y cuando se han producido el pasado 21 de octubre las elecciones autonómicas vascas. La reunión se había pretendido desarrollar, en un principio, en verano, pero fue imposible hacerlo.

En el encuentro, Johathan Powell intercambiará puntos de vista con los asistentes y les trasladará las gestiones que han estado realizando en los últimos meses. Además, quiere estudiar nuevas medidas a desarrollar en el futuro, con el fin de abordar cuestiones como el desarme, la situación de presos o el resarcimiento de las víctimas, entre otras cuestiones.

Además, hay otra cita prevista en Baiona para el próximo 15 de diciembre, que reunirá a agentes políticos, sindicales y sociales para dar a conocer esta Declaración a la ciudadanía del País Vasco francés.

La Conferencia de Paz, que se desarrolló el pasado año, marcó una hoja de ruta con cinco puntos para lograr "una paz justa y duradera". En ella emplazaba a ETA a "hacer una declaración pública de cese definitivo de la actividad armada y solicitar diálogo con los gobiernos de España y Francia para tratar exclusivamente las consecuencias del conflicto. Además, se dirigía a los Gobiernos de España y Francia para reclamarles el inicio de "conversaciones para tratar exclusivamente las consecuencias del conflicto".

Además, subrayaba la necesidad de "adoptar pasos profundos para avanzar en la reconciliación, reconocer, compensar y asistir a todas las víctimas, reconocer el dolor causado y ayudar a sanar las heridas personales y sociales".

Asimismo, sugería que los representantes políticos se reunieran y discutan sobre cuestiones políticas y sobre una consulta a la ciudadanía, que podría contribuir "a una nueva era sin conflicto".

La Declaración también apuntaba que el diálogo también podría ser asistido por "facilitadores internacionales si así fuese decidido por las partes involucradas". "Estamos dispuestos a organizar un comité de seguimiento de estas recomendaciones", concluyeron las personalidades internacionales que participaron en la Conferencia de Paz.