El perito judicial encargado de examinar la contabilidad de la Cooperativa de Monte no ha podido hacerlo porque la documentación que le adjuntaron en un 'disquette' tenía "serios defectos" que han hecho "imposible" responder a esta tarea que le había sido asignada.

Así lo ha reconocido este lunes en la cuarta jornada del juicio por la quiebra de la Cooperativa de Monte el perito judicial designado para analizar la contabilidad de esta sociedad, tal y como había reclamado la defensa del principal imputado en la causa penal, el gerente de la sociedad José Ramón G.F., quien ha explicado a la Sala que en los archivos que le fueron entregados en dicho 'disquette' "no se identifica" a qué hacía referencia cada documento, ni se indicaba si los mismos correspondían, ni siquiera, a la contabilidad de la Cooperativa y tampoco se separaban los "enteros de los decimales".

"Es como si no hubiera contabilidad a efectos míos", ha afirmado el perito, quien, a preguntas de las partes, ha asegurado que, en la documentación que ha analizado, no había "dobles balances" contables. "Sinceramente, no los he visto", ha dicho.

En la jornada de este lunes, también ha declarado otro perito que había sido designado para analizar la documentación de la empresa de la empresa de metalurgia que tenían los hermanos Ricardo y Juan Carlos d.C., dos de los siete acusados en la causa penal.

A ambos se les imputa una deuda con la Cooperativa de 716.000 euros, la de menor cuantía entre todos los demás acusado ya que el resto oscilan entre los 763.000 euros y 11 ,4 millones. El fiscal y la acusación piden para cada uno de los dos hermanos una pena de prisión de seis años y un día y una multa de 7.200 euros.

En contra de lo que manifestaron en su declaración estos dos imputados, este perito ha asegurado que los hermanos no eran desconocedores de la mala evolución de sus ingresos porque "firmaban" sus cuentas anuales que así lo indicaban.

También, y cuestionado por el abogado de estos dos imputados, ha negado que esta situación de la empresa se debiera únicamente a la devolución de unos pagarés por valor de 35.000 euros que le había entregado a modo de pago de unos trabajos una de las empresas de otro de los imputados.

Según ha expuesto el perito, la "mala situación" de la empresa se debe a las "pérdidas" sufridas a lo largo de años. "Es algo más complejo y más gordo que todo eso", ha aseverado.

Tras la declaración de este segundo perito, la vista de este lunes ha concluido y el juicio no se retomará hasta el próximo lunes, cuando se iniciarán las declaraciones de los testigos.

Entre los 35 previstos, figura uno de los auditores de las cuentas de la Cooperativa, Luis B., quien declarará en calidad de testigo-perito —inicialmente estaba previsto que lo hiciera únicamente como testigo— por autorización de la Sala y a petición del Ministerio Fiscal y contra lo expresado por la defensa.