Admitida parcialmente la querella del 15-M por acoso inmobiliario en la Casa del Aire

El juzgado número 5 de Granada ha admitido parcialmente la querella presentada por el 15-M, a través de su grupo 'Stop Desahucios', junto a la Asociación de Juristas 17 de Marzo, contra los propietarios de la Casa del Aire del barrio granadino del Albaicín, admitiendo finalmente la querella contra los administradores de la inmobiliaria Edivara SL --propietaria del edificio-- por un presunto delito de coacciones, pero no lo contempla en su modalidad de acoso inmobiliario por considerarlo "prescrito", y archiva el delito contra la integridad moral.

El juzgado número 5 de Granada ha admitido parcialmente la querella presentada por el 15-M, a través de su grupo 'Stop Desahucios', junto a la Asociación de Juristas 17 de Marzo, contra los propietarios de la Casa del Aire del barrio granadino del Albaicín, admitiendo finalmente la querella contra los administradores de la inmobiliaria Edivara SL —propietaria del edificio— por un presunto delito de coacciones, pero no lo contempla en su modalidad de acoso inmobiliario por considerarlo "prescrito", y archiva el delito contra la integridad moral.

El 15-M y la Asociación de Juristas 17 de Marzo presentaron el pasado 28 de junio la primera querella en Andalucía por acoso inmobiliario. En la querella, los colectivos atribuían a Edivara y a sus representantes legales o administradores un delito de coacciones "a través de actos hostiles o humillantes que tengan por objeto impedir el disfrute de la vivienda", y otro contra la integridad moral contra los dos últimos inquilinos de la Casa del Aire, Clara Martínez y Manuel Prieto, sobre los que, según aseguraban, se ha ejercido "un claro ejemplo de acoso inmobiliario por parte de Edivara, que durante los últimos nueve años ha actuado al modo de 'asustaviejas' para lograr que los inquilinos se marcharan de ella".

Finalmente, la resolución del juzgado número 5 de Granada, a la que ha tenido acceso Europa Press, admite a trámite un presunto delito de coacciones, pero desestima que se produzca delito contra la integridad moral, puesto que "en los hechos denunciados subyace un ánimo de compeler a abandonar la vivienda y no de dañar moralmente".

Asimismo, el magistrado puntualiza que en esta querella sólo se admitirán los hechos posteriores al 21 de enero de 2010, "concretamente los referidos a la falta de luz en escalera por avería no reparada, la falta de llegada del correo y la colocación de un cartel impidiendo la visita de personas", considerando prescritos los hechos anteriores.

Por último, señala que la posibilidad de accionar penalmente contra una persona jurídica no cabe respecto al delito de coacciones, por lo que inadmite la querella contra la inmobiliaria como responsable penal y admite la querella sólo contra los representantes legales.

"reafirmación de la lucha de los vecinos"

Stop Desahucios ha afirmado en un comunicado que la admisión de la demanda supone "la reafirmación de la lucha por los vecinos de la Casa del Aire, que continúan sufriendo la presión por parte de los propietarios". En este sentido, ha hecho referencia al juicio aplazado hasta mayo de 2013 en el que Edivara "acusa tanto inquilinos como personas por defender el derecho a la vivienda y luchar contra la especulación urbanística".

El grupo ha situado este caso de acoso inmobiliario dentro de las "prácticas especulativas y las presiones que se llevan viviendo desde hace años en el barrio del Albaicín", y ha considerado a la Casa del Aire como "uno de sus ejemplos más visibles".

"un acoso constante"

El último vecino que queda en el inmueble, Manuel Prieto, manifestaba cuando se presentó la querella que los propietarios "se han negado a rehabilitar la casa, para declararla en ruinas y echarnos. Nos han cortado los suministros. Nos han hecho todo tipo de coacciones, amenazas, golpes en la puerta, acoso constante".

Manuel, que lleva en régimen de alquiler en la Casa del Aire desde 1980, ha explicado a los periodistas que la empresa le está poniendo problemas para arreglar el sistema de fontanería del edificio, y que ha hecho lo posible para echar de la vivienda, en la calle Zenete, 7, a sus habitantes. "Hay un patio llenos de escombros, es antihigiénico, y tengo que entrar a mi casa a oscuras, con una linterna que llevo en el bolsillo", ha asegurado.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento