La empresa Kontrol 34 se ha desvinculado de la fiesta del 1 de noviembre en el Madrid Arena y ha asegurado que solo facilitó a Diviertt, promotora del evento, una lista de porteros de discoteca que podría actuar como controladores de acceso al recinto.

Kontrol 34 figura en un documento oficial firmado por el director de Seguridad de Madrid Espacios y Congresos, Rafael Pastor Martín. Según el mismo, Diviertt comunicó a la empresa pública que gestiona el Madrid Arena que el "equipo de servicio de orden" (no confundir con el personal de seguridad) para la Thriller Music Park lo formarían "75 operativos" de Kontrol 34. "Seguridad está a cargo de Kontrol 34 S.L. (Interior)", reza el documento en cuestión.

Sin embargo, Kontrol 34 no tiene acreditación como empresa de seguridad y niega cualquier relación contractual con Diviertt. En un comunicado hecho público este viernes, afirma que su papel se limitó a facilitar los nombres de porteros con los que trabaja habitualmente y de otros con los que cuenta en calidad de extras "para eventos concretos" donde precisan más mano de obra.

"Diviertt contrató a cada uno de dichos controladores dándoles de alta en la Seguridad Social", puntualiza la compañía, Asimismo asegura haber asesorado a Diviertt "para las cuestiones relacionadas con la contratación de dichos trabajadores y el desarrollo del trabajo de los mismos".

De esta forma, la empresa quiere quedar al margen de la tragedia de Halloween, asegurando que los porteros, todos ellos con el carnet de controlador de acceso que expide la Consejería de Presidencia y Justicia de la Comunidad de Madrid, pasaron a depender de la promotora del evento.

Bajo su mando, según esta versión, el personal permitió que menores de edad y personas sin entrada franqueasen la zona de acceso. Además de Belén Langdon, la menor de edad que murió tras verse implicada en la avalancha humana que tuvo lugar a las 4.00 horas del 1 de noviembre, otros menores han relatado a 20minutos.es cómo accedieron al Madrid Arena sin problemas, ya que nadie les solicitó el DNI. El aforo, finalmente, fue "sobradamente sobrepasado", según la Policía.

Antes, los vigilantes de la empresa encargada de la seguridad, Seguriber, dejó acceder a los chicos al perímetro interior de la infraestructura con bengalas, petardos o drogas, según han afirmado testigos presenciales.

Dentro del edificio no había personal de seguridad. Seguriber aseguró que solo se ocupaba de lo que ocurría fuera y de las puertas de emergencia. Diviertt no contrató más personal al considerar que Seguriber, contratada por el Ayuntamiento de Madrid pero pagada por ella esa noche, debía ocuparse del dispositivo integral. El personal facilitado por Kontrol 34 no podía ejercer esas labores.

En el comunicado emitido este viernes, Kontrol 34 defiende la honorabilidad de sus apoderados, Carlos Manzanares Rodríguez (cuyo hermano fue asesinado en un ajuste de cuentas a las puertas de una dicoteca) y Emilio Belliard Cueto. El texto, en cambio, no menciona a Juan Carlos García Perdiguero, que desde el 18 de septiembre de 2012 es administrador único de la empresa. Según la Policía, este pertenece al movimiento neonazi y tiene antecedentes penales.