Sargento contradice al guardia civil imputado y señalan huellas del otro en unas balizas

El sargento del Servicio Marítimo de la Guardia Civil ha declarado este viernes en la cuarta sesión del juicio contra una organización, conformada por 13 personas --entre ellas dos agentes de la Guardia Civil--, acusada de sabotear el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) en la zona de Lepe y de facilitar y dar cobertura necesaria para que las bandas que así lo requirieran lograran introducir alijos de hachís en la costa de la provincia onubense y ha contradicho la versión que dio el agente del Instituto Armado, J.M.T, imputado en el caso.
Tercera sesión del juicio.
Tercera sesión del juicio.
EUROPA PRESS
Tercera sesión del juicio.

El sargento del Servicio Marítimo de la Guardia Civil ha declarado este viernes en la cuarta sesión del juicio contra una organización, conformada por 13 personas —entre ellas dos agentes de la Guardia Civil—, acusada de sabotear el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) en la zona de Lepe y de facilitar y dar cobertura necesaria para que las bandas que así lo requirieran lograran introducir alijos de hachís en la costa de la provincia onubense y ha contradicho la versión que dio el agente del Instituto Armado, J.M.T, imputado en el caso.

El sargento ha asegurado que J.M.T, el agente del Servicio Marítimo de la Benemérita de la Guardia Civil de Huelva, acusado de un delito de tráfico de drogas y de asociación ilícita, "cambió el turno" para hacer vigilancia de noche que se interceptó el alijo introducido en la playa de La Bota el 8 de febrero de 2011, así como que pasó toda la noche despierto haciendo labores de vigilancia y que este le comunicó por la mañana que la Policía Nacional había interceptado dicho alijo.

No obstante, este martes, el agente imputado indicó que esa noche estaba prestando sus servicios en una patrullera de la Guardia Civil junto a un sargento, con el que estuvo acompañado toda la noche, indicando además que "no mantuvo desde la patrullera ninguna conversación con L.G.M." y que durmió con el sargento en el mismo camarote y que no cambió el turno para hacer guardia ese día.

Por su parte, otro agente, miembro del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil, ha narrado que inspeccionó dispositivos de balizamiento, —instalados con el objetivo de que estos estuvieran siempre localizados por la supuesta red—, en cuatro vehículos patrullas de la Guardia Civil y en una encontró una huella del presunto líder de la banda, L.G.M.

En esta misma línea, otro agente de este mismo departamento ha indicado que había balizas en cuatro vehículos y en una patrullera, y en esta última encontró huellas de L.G.M y dos en los coches del otro agente de la Guardia Civil acusado, cuya identidad responde a las iniciales J.L.A.B.

Este lunes continuará el juicio con una nueva sesión, en la que prestarán declaraciones agentes de la Guardia Civil y peritos, y está previsto que, si es posible, se adelante al mismo lunes la declaración de los testigos de las defensas, señaladas para el martes.

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