Los responsables del sindicato UPA-UGT han alertado este miércoles de la "duplicidad" y el "engaño" que se está produciendo en la representación para la renovación de la Interprofesional del Vino de Rioja, ya que Asvit, una escisión del sindicato ARAG-Asaja, "tiene la misma sede" que la organización de la que se desgajó, "así que al final, son lo mismo".

El secretario de Organización de UPA, Tomás Latasa, ha señalado que "entre ayer y hoy, se están mandando más de 9.400 cartas con los impresos de acreditación" para renovar la Interprofesional, y que se deben repartir entre siete organizaciones.

Así, ha señalado que, entre otras novedades para este proceso sobre el celebrado hace cuatro años, "tenemos una nueva organización", la Asociación de Viticultores de La Rioja (Asvit), "que comenzó siendo una escisión de Asaja con sede en Calahorra".

Sin embargo, ha asegurado que "hemos podido comprobar que esta organización ha trasladado su sede social a la calle San Fernando número 83 de Nájera, que es la misma sede social que tiene ARAG-Asaja", por lo que ha afirmado que "se da duplicidad en la representación".

"Además, es engañoso para los agricultores, que podrían pensar en votar a esta organización porque no quieren votar a Asaja, y, al final, resulta que son lo mismo", ha reseñado Latasa.

Se ha quejado, igualmente, de que, en este momento, la representación del sector bodeguero en la Interprofesional está en un 80% "y nosotros, sin una defensa conjunta de las organizaciones agrarias unidas, estamos perdidos".

Por su parte, como ha señalado el secretario general de UPA, Eusebio Fernández, la situación creada es "de incumplimientos y engaños, una forma de dilucidar intereses".

En este sentido, ha añadido que "no puede ser que, debido a la percepción de que había agricultores descontentos, se cree a bombo y platillo una organización y que, al final, sea la misma; no se puede crear una organización diciendo que es distinta para que los agricultores voten, y luego, aglutinar ese voto en una sola".

Se ha lamentado que "en años anteriores, se ha tenido que tirar uva, y este año, incluso, ha habido agricultores que han tenido que malvender", porque, con la situación actual, los bodegueros "pondrán los precios que quieran, hay organizaciones que prefieren juntarse con las bodegas para llegar a acuerdos antes que con el resto de representantes de los agricultores".

Fernández ha recordado que, hace cuatro años, en el anterior proceso, "se llegó a un acuerdo sobre un nombre, pero, al final, no se produjo la renovación porque Asaja cambió su voto".

"Ahora -ha señalado- abogamos por el cambio, pero, sin acuerdo, estamos donde estábamos. No nos queremos cargar el Consejo o la Interprofesional, pero lo que no puede ser es que, si nuestro negocio es el 20%, tengamos que poner el 40% del presupuesto. Lo que queremos es que cada uno vote en libertad, pero sin engaños".