El Ayuntamiento de Madrid ahorrará 11 millones de euros al año al unificar desde el próximo 1 de enero 13 contratos de recogida de residuos en uno solo. Este ahorro repercutirá en los ciudadanos en una reducción de la tasa de basuras de aproximadamente un 8%.

La alcaldesa, Ana Botella, y el delegado de Medio Ambiente, Seguridad y Movilidad, Antonio de Guindos, informaron este miércoles tras la Junta de Gobierno de que el nuevo contrato "integrado" saldrá con un presupuesto de licitación de 542.887 euros para un periodo de ocho años prorrogable por otros dos.

Se trata del contrato de colocación de contenedores, recogida y transporte de residuos en la zona periférica  y otras prestaciones en la almendra central. Incluye los servicios de de recogida en mercados, centros sanitarios, eventos, grandes productores, animales muertos, retirada de contenedores no autorizados, retirada de residuos y saneamientos de viviendas y locales en toda la ciudad.

El precio de licitación se reduce en un 16% respecto a 2012 aunque el ahorro final puede ser mayor en función de las ofertas económicas que presenten los empresas interesadas al concurso.

El nuevo contrato integral no incorpora el vigente de la zona centro, ya que no finaliza hasta noviembre de 2015, aunque se modificará para evitar diferencias entre ambas zonas, también con un ahorro que en este caso será del 4,8 %.

Según las nuevas condiciones decretadas por el Ayuntamiento, la recogida de residuos orgánicos se realizará de lunes a sábado excepto festivos.  La de envases, tres días a la semana, también excepto festivos. No obstante, se recogerán todos los residuos los festivos que coincidan en sábado o en lunes. La recogida de papel y vidrio, puntos limpios, pilas usadas, etc., se hará según demanda.

Al menos el 20 % del parque de contenedores debe ser adaptado para su uso por personas con discapacidad. En el plazo de un año, el adjudicatario debe desarrollar una plataforma informática que permita geolocalizar todos los contenedores instalados en la vía pública. Esta plataforma deberá completarse permitir la posibilidad de utilizar dispositivos móviles por parte de controladores municipales con los que comprobar los estándares de calidad del servicio, ya que el Ayuntamiento pagará en función de los resultados.