Exconselleiros en las sucesivas etapas de Manuel Fraga al frente de la Xunta han lamentado este lunes la muerte de José Antonio Orza Fernández, de quien dicen que fue "mucho más que el contable" del 'león de Vilalba', al que acompañó durante 16 años como responsable de la gestión económica de la Comunidad. Sus compañeros le recuerdan también como un hombre "serio y riguroso, pero afable: el que solucionaba los problemas".

"No era ni mucho menos sólo el contable que ajusta las cuentas, tenía visión de futuro y sabía a dónde se encaminaba", ha descrito, en declaraciones a Europa Press, Manuela López Besteiro, quien coincidió con Orza durante varios años en el Ejecutivo autonómico, durante la etapa en la que Fraga le confió a ella el departamento de familia, mujer y juventud.

En el plano personal, López Besteiro siente "que se ha ido un amigo", del que destaca en lo profesional "su seriedad, rigor y profesionalidad". "No fue un mero contable, a él le preocupaban los problemas de cada consellería y les daba respuestas, en los tiempos difíciles priorizaba y en presupuestos de bonanza no se dejaba llevar por las alegrías", ha esgrimido.

Al igual que el exconselleiro de Xustiza y actual miembro del Consello de Contas Jesús Palmou, quien ha incidido también en su "rigor", López Besteiro recuerda que Orza sabía decir que antes de respaldar en el ámbito financiero un proyecto "hacía demostrar a quien se lo pedía que se podía sostener económicamente".

"Su función era también decir que no y lo hacía cuando era necesario", ha recordado, en la misma línea, el que fuera vicepresidente con Fraga y presidente del PP de Lugo, además de portavoz del PP en el Senado, José Manuel Barreiro. Para él, Orza es "uno de los artífices de la consolidación económica de Galicia".

"Ha fallecido una buena persona", ha rememorado, en declaraciones a Europa Press, antes de destacar que mantenía "una gran amistad" con él y que, en el trato personal, "siempre tuvo una relación muy cordial". En su perfil, habla de "un hombre íntegro, con una capacidad de trabajo que desbordaba cualquier tipo de expectativa que se pudiese plantear y una lealtad inquebrantable".

"uno de los mejores conselleiros"

El senador del PPdeG por designación autonómica y exconselleiro de Pesca Enrique López Veiga sostiene, "sin querer molestar a nadie", que José Antonio Orza fue "uno de los mejores conselleiros que hubo en los 16 años de Fraga al frente de la Xunta". "Tuvo su confianza y con razón, era la sensatez en persona", ha defendido.

Tras admitir que aprendió "mucho de él", ha recordado que "enseñaba a ser razonable y a plantear los gastos como alternativa". En el ámbito económico y con la crisis marcando el terreno financiero, recuerda que "siempre tenía muy presente que Galicia no tenía que endeudarse excesivamente". "Era un hombre que aportaba soluciones", coincide con otros compañeros del PP y de la Xunta.

En su apartado concreto de gestión y en el décimo aniversario de la catástrofe del 'Prestige', López Veiga recuerda que Orza fue el artífice de que Pesca pudiese, en su día, "efectuar los pagos rápidos" cuando se hundió el petrolero y el fuel tiñó de negro algunas zonas de la costa de Galicia. "Era difícil hacerlo, pero lo hizo", rememora.

También en su faceta de "solucionador de problemas" incide el exconselleiro Víctor Manuel Vázquez Portomeñe, quien mantuvo con Orza "una relación absolutamente extraordinaria, de dos verdaderos amigos". De él, destaca que fijó "las bases del desarrollo económico de Galicia", que "siempre le tendrá que agradecer una entrega difícil de superar".

"hijo de maestro"

Vázquez Portomeñe recuerda que Orza "sabía del valor del dinero, algo que ahora es tan de aplaudir", mientras que el que fue conselleiro de Sanidade José María Hernández Cochón ha manifestado a Europa Press que "siempre fue un hombre tremendamente minucioso". "Como todo buen gestor de recursos buscaba la fórmula para solucionar los problemas", ha enfatizado.

Hernández Cochón sostiene que Orza "no tenía más que amigos", mientras que Celso Currás, exconselleiro de Educación, le define como "una persona muy rigurosa y conocedora de todos los pormenores de la vida pública". Recuerda que pasaron "muchas tardes y noches" negociando los presupuestos de Educación, "un pozo sin fondo", y elogia "su rigor".

Al margen de su "valía profesional", Currás ha insistido en introducir en su perfil que fue "hijo de un maestro que marcó un hito en la historia de Boqueixón, donde hay un colegio que lleva su nombre" y en lo que para él significó "ser hijo de alguien así". "Tenía una faceta muy entrañable y muy humana", ha subrayado.

Por último, el exconselleiro de Presidencia Jaime Pita le ha definido como "un magnífico compañero y un gran amigo". En el ámbito profesional, destaca, sobre todo, "su seriedad" y concluye que el hecho de "reunir todos los méritos para que el presidente Fraga confiase reiteradamente en él" es un hecho "que habla por sí mismo".

Hombre de números

Natural de Boqueixón (A Coruña), donde nació en noviembre de 1941, José Antonio Orza Fernández —'Cholo' en su círculo de amistades— fue el responsable de la gestión económica de la Xunta en 1986 y desde 1990 hasta 2005, en todos los mandatos de Manuel Fraga, quien también falleció a principios de este año, además de secretario ejecutivo de Economía y Empleo en el PP gallego.

Licenciado en Derecho por la USC, Orza era miembro del Cuerpo Superior de Inspectores de Finanzas del Estado desde 1971. Prestó servicios en Madrid, Zamora, Bilbao y A Coruña. En la anterior legislatura, tras perder Fraga la mayoría absoluta en 2005, ocupó un escaño en el Parlamento, donde presidió la Comisión de Economía y fue miembro del órgano que estudió la Reforma del Estatuto de Autonomía de Galicia.

Tras recuperar Alberto Núñez Feijóo la mayoría absoluta para el PP en 2009, su nombre entró en las quinielas para los departamentos económicos, pero finalmente fueron Javier Guerra y Marta Fernández Currás —que posteriormente fue relevada por Elena Muñoz tras marcharse a Madrid como secretaria de Estado de Presupuestos— quienes se repartieron las Consellerías de Economía y Facenda, respectivamente.

Sí hubo un hueco para él en el Consello de Contas, una etapa en la que, según ha manifestado a Europa Press la ahora jefa del Legislativo y exconselleira de Familia de la última etapa del Gobierno de Fraga, Pilar Rojo, vivió "con mucha ilusión" puesto que "a él lo que le gustaba y con lo que realmente se sentía realizado es con el servicio público".