El Consejo General de Cámaras de Catalunya ha enviado una carta a la ministra de Fomento, Ana Pastor, en la que le urgen a poner en funcionamiento la autovía A-27 para reactivar la economía y contribuir al crecimiento del tejido empresarial.

En el manifiesto, el consejo ha destacado que la duración de las obras "no tiene justificación posible", ya que la sociedad lleva 35 años esperando esta infraestructura y, según ha recalcado, el Gobierno la lleva retrasando desde 2005, cuando se debería haber puesto en servicio el primer tramo Tarragona-El Morell.

Las cámaras han ensalzado la importancia del eje viario Tarragona-San Sebastián porque corrige el sistema radial de la red de carreteras del Estado y comunica el tejido empresarial de Catalunya, Aragón, Navarra y País Vasco, que representa el 12,5% de la superficie, el 27% de la población y el 31,6% del PIB del Estado).

El retraso del Gobierno en ejecutar esta infraestructura ha comportado que hayan sido las empresas y los territorios los que hayan asumido los costes hasta ahora, según el manifiesto, si bien la crisis impide que puedan continuar haciéndolo.

El consejo ha señalado que la autovía del Pirineo (A-21, Pamplona-Jaca), que enlaza con la A-23 (Sagunto-Somport) y a través de ésta con Huesca por la A-22 (Huesca-Lleida) están prácticamente completadas, mientras que la autovía Tarragona-Montblanc, de 29,6 kilómetros, tiene un bajo nivel de ejecución.

Ha destacado que las empresas necesitan cada vez más ampliar sus mercados exportadores y el papel de los puertos como canalizadores de las mercancías, por lo que la A-27 resulta "indispensable" para dinamizar Lleida y Terres de Ponent.

El Puerto de Tarragona necesita también el desarrollo de esta infraestructura, que le permitirá conectar con su 'hinterland', Lleida y Aragón, si bien los Presupuestos Generales del Estado (PGE) tan sólo incluyen una partida con una dotación algo superior al millón de euros para el tramo El Morell-Variante de Valls, y 29.000 euros para la variante.

Tijeras como obsequio

Los presidentes de las cámaras de comercio catalanas adjuntan junto a la carta y el manifiesto unas tijeras a la ministra como "obsequio" que han bautizado como las tijeras de la 'No inauguración de la No A-27'.

Firman la carta las cámaras de Barcelona, Girona, Lleida, Tarragona, Manresa, Palamós, Reus, Sant Feliu de Guíxols, Sabadell, Tàrrega, Terrassa, Tortosa y Valls, es decir, todas las cámaras catalanas.